LA
PAZ, 1 de junio.— El presidente boliviano, Evo Morales, inauguró hoy
en la ciudad de El Alto el programa Mi Salud con la intención de
llevar atención médica gratuita, casa por casa, a la mayoría de la
población.
El mandatario destacó la importancia del referido programa y
enfatizó que, de salir bien en El Alto, el año próximo se llevaría a
todos los lugares del país, con el objetivo de garantizar la
medicina preventiva, más eficiente que la curativa, según sus
propias palabras.
Mi Salud, que cuenta con asesoramiento cubano, contará en El Alto
con 150 médicos graduados en universidades cubanas, la misma
cantidad de enfermeras, y otro personal técnico.
El jefe de Estado enfatizó durante la ceremonia inaugural que la
salud es un derecho humano y que solo falta implementar los
programas para hacerlo cumplir y se preguntó "cómo podemos acabar
con esos lugares donde no hay médicos".
Al mismo tiempo, consideró a los galenos como "soldados para la
vida", tal como catalogó a las Fuerzas Armadas de soldados de la
patria y a los petroleros de soldados de la economía.
Morales criticó a "aquellos que se han ido al paro recientemente
en perjuicio del pueblo y su salud", agradeció la colaboración
cubana y pidió al embajador cubano, Rolando Gómez, la posibilidad de
"seguir contando con el apoyo y la experiencia de su país".
"Los graduados en Cuba -enfatizó- tienen una nueva formación,
tienen mucha conciencia social".
También insistió en que quiere "otro modelo de médico, otro
modelo de enfermera, que sientan por sus hermanos", y agregó que "el
pueblo tiene mucha confianza en sus profesionales".
Morales recordó también otros programas de beneficio social,
entre ellos MI Agua (Más Inversión para el Agua) y el bono Juana
Azurduy, los cuales han permitido que mejoren los indicadores de
vida y salud para la población.
El embajador cubano, por su parte, recordó que la "atención primaria
de salud es la base sobre la que se sustenta nuestro sistema de
salud y son bien conocidos los resultados con esa política".
Gómez recordó algunos indicadores en los cuales Cuba se encuentra
a la cabeza de Latinoamérica, entre ellos una mortalidad infantil de
4,5 por cada mil nacidos vivos y una esperanza de vida al nacer de
78 años.
También agradeció la forma en que el pueblo boliviano acogió a
los galenos cubanos, desde que llegaron al país del altiplano en
2006, y aseguró al presidente Evo Morales que "no lo defraudaremos
jamás y corresponderemos a su amistad y a su lucha antiimperialista
con pleno compromiso y consagración en el fortalecimiento de
nuestras relaciones".