Sigfredo Barros
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Un pelotón de 16 equipos salió disparado al sonido del pistoletazo de arrancada a finales del mes de noviembre del pasado año. Por el camino se fueron quedando algunos. Ya no están ni el campeón ni el subtitular de la anterior contienda. Tampoco pudieron llegar a la meta elencos de enorme tradición: Santiago y Pinar. Es difícil avanzar a discutir el título en la pelota cubana.

Jorge Hernández tuvo su mejor temporada con los Elefantes.

Solo quedan cuatro, un representante de occidente y tres del centro. Cienfuegos, Sancti Spíritus, Matanzas y Villa Clara son ahora los cuatro grandes. Los que mejor jugaron. Y desde mañana saldrán al terreno en busca de la gloria, animados por una afición que gozará de lo lindo y aplaudirá cada jugada, cada batazo.

¿Favorito? No sería justo mencionar a uno después de tanto esfuerzo, tanta entrega durante cinco meses. Mejor sería analizar —aunque sea someramente—, las virtudes y los defectos de cada cual. Manos a la obra entonces.

CIENFUEGOS VS. VILLA CLARA.—Si en el béisbol se gana por ofensiva, los Elefantes tendrían las mayores opciones. Fueron los líderes en varias categorías a saber: average de bateo, carreras anotadas, impulsadas, jonrones (66, de ellos 13 con hombres en circulación), slugging, bases robadas (66 también).

Una selección que combina fuerza con velocidad será siempre un adversario temible. Su pitcheo no estuvo mal, con una pareja de abridores integrada por Noelvis Entenza y Jorge Hernández que de conjunto cosechó 14 victorias con solo cinco reveses en la ronda de primera división y Duniel Ibarra salvó 11 juegos en la misma etapa. A lo que agregaría que, al parecer, el mentor Iday Abréu pidió prestada una bola de cristal a la hora de elegir los refuerzos: William Luis empató con José Dariel Abréu en el liderato de jonrones y Lednier Ricardo le resolvió el problema en la receptoría.

El reverso de la medalla es Villa Clara. Pitcheo, pitcheo y más pitcheo, al extremo de liderar el casillero de carreras limpias —uno de los dos únicos conjuntos por debajo de las tres limpias—, y sus relevistas también finalizaron al frente en PCL, además de un llamativo balance positivo entre ponches y bases de más de 170. Freddy Asiel, el zurdo Misael Siverio, el cerrador Diosdani Castillo y el renovado Jonder Martínez, con cinco victorias sin derrota, son cartas de triunfo del mentor Ramón Moré. El haber sido últimos en average de bateo, anotadas y jits no los descalifica.

SANCTI SPÍRITUS VS. MATANZAS.—Sed de victoria une a estos dos conjuntos. Los espirituanos casi no recuerdan cuándo fue que levantaron la copa de campeones. Los matanceros nunca lo han hecho con ese nombre. Ahora se ven las caras por segunda vez en un play off, ambos con la mira puesta en pasar a la final.

Los Gallos comenzaron con el pie derecho en la clasificatoria y acumularon suficientes éxitos que les permitieron resistir el molesto slump sufrido por varias de sus figuras principales en los días finales de la segunda mitad de la temporada. Finalizaron en los puestos entre el quinto y el sexto en average, anotadas y jits, pero no perdieron el poder (51 cuadrangulares, 15 con corredores en bases).

Ismel Jiménez, en la foto y Joel Suárez serán los puntales en el pitcheo de Sancti Spíritus y Matanzas.

El propio Ismel Jiménez, primer lanzador de Cuba en el Tercer Clásico, no fue el mismo de la etapa clasificatoria, terminando la primera división con foja de cuatro triunfos y tres fracasos, con 3,35 de PCL. Pero el camagüeyano Norge Luis Ruiz, con sus seis victorias, y el holguinero Yaisel Sierra, salvando seis partidos, le dieron un nuevo aire al plantel. Yovani Aragón no cree en el mito de la "generación perdida" y está convencido de que sus Gallos picarán a la hora buena.

Por segundo año consecutivo los Cocodrilos sienten el sabor de una postemporada, luego de estar a un triunfo de llegar a la finalísima el año pasado. El pitcheo le ha jugado una mala pasada a Víctor Mesa, sexto y séptimo en PCL tanto sus abridores como sus relevistas. Tuvo que darles baja a varios y llamar a filas a lanzadores de experiencia como Ciro Silvino, Frank Navarro y Lázaro Blanco, con buenos resultados.

Así y todo llegó hasta aquí, en buena medida por el bateo de José Miguel Fernández —discutiendo el título con Despaigne hasta la última semana—, la oportunidad para decidir de Yurisbel Gracial, el más de centenar de jits de Ariel Sánchez y ese nuevo fenómeno llamado Joel Suárez, ganador de ocho juegos en esta etapa. Tienen garra los Cocodrilos, sin duda, y repartirán más de un coletazo.