BEIJING.—
El número de personas muertas en el terremoto que azotó hoy el
suroccidente chino se mantiene en ascenso y alcanzó las 157,
mientras prosiguen intensas labores de rescate y ayuda organizadas
por el primer ministro Li Kegiang.
Las cifras de fallecidos han ido aumentado por hora desde que el
sismo de siete grados de intensidad sacudió regiones de la provincia
de Sichuan a las 08:02 hora local.
Fuentes oficiales informaron que el premier Li voló en
helicóptero hasta el epicentro del seísmo, en la localidad de Lushan,
condado de Ya'an, y convocó una reunión en el cuartel general
establecido para atender la crítica situación provocada por este
siniestro.
El jefe de Gobierno insistió en que la prioridad es salvar vidas,
dijo que no se debe perder un solo minuto y que hay que aprovechar
lo que se conoce como el período dorado, las primeras 24 horas de un
fenómeno natural de este tipo.
Li exhortó a revisar cada vivienda para asegurar que los
residentes están protegidos y a buen recaudo, dijo que los médicos
deben tratar de inmediato a los rescatados y que se debe garantizar
alojamiento, alimento y agua potable para los habitantes de la zona,
así como tomar medidas para evitar epidemias.
El dirigente chino habló de la relevancia de esfuerzos para
prevenir más tragedias a causa de las réplicas del sismo y desastres
naturales como deslizamientos de tierra, y subrayó la importancia de
promover campañas de alerta para la auto protección de los
pobladores.
Recomendó brindar suficientes tiendas de campaña, materiales de
primeros auxilios, vehículos y otros productos de ayuda necesarios,
reparar rápidamente los servicios de electricidad y comunicaciones,
así como carreteras para asegurar el acceso de los recursos.
En sus orientaciones, Li llamó a fortalecer la cooperación entre
el gobierno central y local, y usar un trabajo de rescate
científico, efectivo, ordenado y vigoroso.
También pidió brindar información sobre la situación, el trabajo
de rescate, las muertes y los heridas de forma adecuada y precisa
para ganar la confianza popular y su tranquilidad.
Entretanto, más de siete mil militares y policías se encuentran
en la zona afectada por el intenso temblor, junto con 10 aviones y
helicópteros para ayudar en las labores de rescate y apoyo,
incluyendo toma de fotografías aéreas, transportación y
reconocimiento.
Se informó que unos 800 oficiales y soldados de la fuerza aérea
se encuentran en el área para abrir un área para los helicópteros y
50 especialistas de ingeniería llegaron para labores de rescate en
el terreno.
El Ejército Popular de Liberación puso en la zona unos 45
vehículos para diversos usos y otros equipos, distribuyó unas mil
tiendas de campañas, pequeños motores, máscaras de protección,
guantes, ropa y linternas.
Otros 60 equipos pesados de la construcción participan en la
búsqueda de sobrevivientes, agregaron las fuentes desde Sichuan.