En el comunicado número uno, emitido aquella mañana del 17 de abril,
el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz anunciaba: Tropas de
desembarco, por mar y por aire, están atacando varios puntos del
territorio nacional al sur de la provincia de Las Villas, apoyadas
por aviones y barcos de guerra... Se está combatiendo en defensa de
la Patria sagrada y de la Revolución contra el ataque de mercenarios
organizados por el Gobierno imperialista de los Estados Unidos.
Entrenados y armados por la Agencia Central de Inteligencia de
los Estados Unidos, los mercenarios desembarcan por la Bahía de
Cochinos, en la costa suroccidental de Cuba. El propósito de los mil
500 apátridas era establecer una cabeza de playa en las costas
cubanas para, desde allí, iniciar una guerra de desgaste con la
pretensión de derrotar el poder revolucionario.