Al Country Club de la urbe tirolesa llegó Alicia con sus pinturas
y fotografías, expresión esta última en la que ha incursionado en
los últimos tiempos con notable creatividad, como lo demostró en la
isla con sus series Mambrú se fue a la guerra y De la
orilla y de la esquina, las cuales impactaron notablemente al
público austriaco.
En la pintura de la artista se aprecia un tratamiento poético de
la realidad y un estricto dominio del dibujo y la paleta cromática,
cualidades valoradas por especialistas, coleccionistas y el público
en un país que cuenta con una larga tradición en las artes visuales
y donde el arte cubano tiene un espacio por conquistar.
A esto se refirió durante la inauguración de la muestra la
diplomática cubana Maiky Díaz Pérez, agregada cultural de la
Embajada de Cuba en Austria, quien agradeció el interés de la
institución anfitriona por abrir una ventana hacia el arte de la
isla caribeña.
En las 44 piezas que integran la exposición se revelan momentos
culminantes de la madurez de una trayectoria profesional que ha
hecho de Alicia Leal una de las creadoras de mayor reconocimiento y
fuerza en la vanguardia artística cubana.
Sus exposiciones personales en Cuba y el extranjero constituyen
acontecimientos por la calidad de sus obras, en las que destacan la
disposición espacial, su capacidad de fabulación, y la
correspondencia entre los temas y su plasmación pictórica. Alicia ha
participado en numerosas muestras colectivas en Cuba y en diversos
países y se ha vinculado a proyectos de carácter social.