"No me gusta hacer pronósticos, siempre salgo a nadar y dar lo
mejor de mí, pero en el Mundial de Barcelona (19 julio al 4 de
agosto) buscaré mejorar el séptimo lugar de Londres, es una de mis
metas", respondió confiado el librista Hanser García, tras imponerse
en los 100 metros con 49.46 segundos, la prueba más interesante en
el cierre de la Copa Marcelo Salado.
Lo cierto es que tanto él como sus coequiperos de la preselección
nacional llegaron cargados a la competencia, producto de varias
interrupciones relacionadas con la actual temporada invernal y
dificultades con las piscinas donde entrenan, de ahí que su
frecuencia en los últimos 25 metros haya disminuido, tras un primer
tramo de 23.83.
"Normalmente la semana previa a un evento fuerte nado entre 10 y
15 kilómetros, a esta llegué con 34, sin haber hecho puesta en
forma, entonces ese volumen tras varios días de intensidad se
convirtió en cansancio. De cualquier manera estoy muy contento con
el resultado, fue fiel a lo proyectado por mi entrenadora María
Luisa Mojarrieta (49.3-49.4), a pesar de no superar el 48.86 del
martes" ahondó.
¿Novedades con la técnica?
"La técnica es una sola, la mía no es la mejor ni mucho menos.
Los que varían son los estilos, el mío todos lo conocen, salir a
bracear y patear, en cada tramo me va la vida, es como una batalla
contra el agua, el cronómetro y los rivales", sentenció.
De vuelta al epílogo de la lid, en la categoría 13-14 y juvenil,
nuevamente descolló Raúl Martínez, dueño del cetro en el hectómetro
del estilo libre con 56.76, al igual que Daniela Benavides
(1:00.12), en tanto los 200 mariposa tuvieron en Lázaro Vergara al
vencedor (2:03.92), por encima de Camilo García (2:05.80).
Sobre la justa valoró el Comisionado Nacional Rodolfo Falcón:
"Los tiempos no han sido buenos, de enero a la fecha el clima y
otros inconvenientes han atentado sobremanera contra una preparación
óptima. En cambio, Hanser, Alex y Pedro, nuestras tres principales
figuras, están bien y deben mejorar en el circuito Mare Nostrum".