Una solución de dos estados sigue siendo posible, pero será
difícil, advirtió durante una rueda de prensa conjunta con el
presidente palestino, Mahmud Abbas.
Según DPA, Abbas exigió una moratoria en la construcción de
asentamientos como condición previa para reanudar las negociaciones,
congeladas desde el 2010.
"Si solo puede haber conversaciones cuando todo está ya
arreglado, entonces no llegaremos nunca a las cuestiones de amplio
alcance", respondió Obama.
Más tarde, ante cientos de estudiantes israelíes en Jerusalén, el
jefe de la Casa Blanca afirmó que "ningún muro ni sistema de defensa
antisimisiles son lo suficientemente perfectos para mantener lejos a
todos los enemigos".
Un Israel "judío y democrático" solo es posible si hay una
Palestina independiente capaz de vivir a su lado, añadió.
Asimismo, dijo que dos estados son la única solución posible para
el problema, pero se apresuró a aclarar que "los palestinos deben
aceptar que Israel es un Estado judío y eso significa también que
tendrán que aceptar la amarga verdad de que nunca podrán volver a la
tierra de sus antepasados en el Israel actual".
Mientras, en las calles de Ramala se veían carteles de Obama que
decían "No Hope" (no hay esperanza), y la policía tuvo que
contener a los manifestantes para que Abbas recibiera al invitado de
alto rango.
EE.UU. es visto en la región como un aliado incondicional del
régimen sionista que ha respaldado las más violentas agresiones
israelíes contra el pueblo palestino, incluidas las operaciones
Plomo Fundido que causaron cientos de muertes.