La
situación de inestabilidad en el Sahel y su vecindad demanda una
solución "más urgente que nunca para el Sahara Occidental", declaró
hoy en la capital Rabat, el enviado especial de la ONU para ese
territorio, Cristopher Ross.
El representante del organismo mundial, quien visita Marruecos
desde este miércoles, aseguró que ha mantenido conversaciones con
sus dirigentes sobre "la mejor manera de hacer avanzar en el proceso
de negociación".
Ross, cuya gira se extenderá hasta el próximo 3 de abril, informó
que su misión ahora es preparar la próxima etapa del proceso de
diálogo, estancado por contraponerse las posiciones de Rabat y los
saharauíes. El Enviado Especial de la ONU continuaba este jueves
conversaciones con el gobierno de Marruecos, que pretende conceder
solo el estatus de autonomía, mientras la población del Sahara
Occidental exige la independencia total.
Los presidentes de las dos cámaras del Parlamento, Abdelilah
Benkirán y Karim Ghelab; el jefe de Gobierno, Abdelilah Benkirane; y
el canciller, Saad Eddine El Othmani, figuran entre los funcionarios
con que se ha reunido Ross.
Un comunicado oficial tras esos encuentros afirmó que Benkirán
recordó al diplomático las "múltiples iniciativas" presentadas antes
por Rabat, todas con la propuesta de "autonomía" saharauí, pero sin
incluir las opiniones del representante del organismo mundial.
Esa omisión en el comunicado develó anteriores diferencias entre
Ross y el gobierno marroquí, que en mayo último le retiró su
confianza, aunque luego fue ratificado por la ONU en el puesto.
El Enviado Especial se quejó al concluir una gira por la región
en noviembre último del manejo oficial de Rabat sobre sus
declaraciones en aquella ocasión.
Varios medios de difusión independientes revelaron entonces la
protesta de Ross respecto a que la prensa local editó sus
declaraciones para que no apareciesen frases como "pueblo saharaui"
expresadas por él.
La nota ahora del gobierno de Rabat trata con el mismo silencio
las expresiones del diplomático estadounidense durante su encuentro
con Karim Ghela.
El comunicado oficial y las declaraciones públicas de Ghelab y
Benkirán respaldaron sus afirmaciones con la tesis de que toda
solución al diferendo saharauí "debe pasar por el respeto a la
integridad territorial de Marruecos". La persistencia marroquí de
conceder el estatus de autonomía en lugar de la soberanía total
defendida por la República Árabe Saharauí Democrática y su partido,
el Frente Polisario, ha sido hasta ahora el principal obstáculo de
esas negociaciones.