BAMAKO,
12 de febrero.— Sorpresivas acciones de resistencia contra las
fuerzas conjuntas franco-malienses durante los últimos cinco días
colocan a Francia en un nuevo escenario de guerra, transcurrido un
mes de su intervención en este país africano.
Escaramuzas callejeras, atentados suicidas, acciones comando y
otras operaciones ejecutadas por milicias rigoristas musulmanas que
esas tropas tratan de expulsar del norte, permiten hablar, incluso,
de una nueva estrategia insurgente.
Oficiales franceses, que luego de su intervención el 11 de enero
último contra los islámicos hablaron de "combates cuerpo a cuerpo",
admiten ahora una inusitada contraofensiva insurgente, según PL.
Las tropas interventoras se desconcertaron este lunes con un
sorpresivo ataque comando en las calles de Gao por islámicos, que
luego se atrincheraron en una comisaría y prefirieron inmolarse con
explosivos antes de caer prisioneros. El mando francés se vio
obligado a ejecutar por primera vez un contraataque con medios
aéreos sobre esa edificación y luego tuvo que realizar otros en una
ciudad que París había declarado hace días recuperada de manos
insurgentes.