Si todos tuviéramos el consumo de los estadounidenses,
necesitaríamos cuatro planetas", afirmó el teólogo y marxista belga
François Houtart, en su intervención en la III Conferencia
Internacional por el Equilibrio del Mundo.
Dijo, además, que Cuba es la excepción, "especialmente por la
conciencia de Fidel que ha venido alertando contra este problema".
También Frei Betto se dirigió a los participantes y expresó que
"gracias a Martí la Revolución preservó su cubanidad", y destacó el
papel de Cuba en el equilibrio de América Latina.
La cultura de la dominación fue el tema central de la
intervención especial del argentino Adolfo Pérez Esquivel. Momentos
después Granma conversó con el Premio Nobel.
—Decía que "estamos aquí para encontrar caminos en un mundo
desequilibrado". ¿Cuál sería el camino?
"No hay un único camino, cada pueblo tiene que elegir el suyo.
Pero todos deben conducir a la liberación, al respeto y al derecho
de los pueblos. Vivimos en un mundo en desequilibrio. En ese sentido
creo que Cuba ha priorizado el camino de la liberación. Muchas veces
lo que los pueblos deben hacer es ver quiénes transitaron esos
caminos, y seguir las huellas de hombres como Martí, Bolívar, Fidel
y Chávez".
—¿Qué sería imprescindible rescatar del Martí en el siglo XXI?
"Yo hablo sobre todo de Martí en su visión de las culturas,
porque la dominación no comienza por lo económico sino por lo
cultural. Y desde ahí tenemos que rescatar su pensamiento. Mientras
no nos reconozcamos en nuestra identidad, nuestros valores y nuestra
pertenencia, seguiremos dominados".
—¿Cómo comenzar a liberarnos?
"Una de las cosas que critico es que en nuestras Universidades se
utilizan muchos textos europeos. ¿Cuándo comenzaremos a estudiar a
los pensadores latinoamericanos? Han levantado muros para que no nos
conozcamos. ¿Qué se sabe de los poetas, de los artistas de nuestro
continente, si en nuestras universidades prácticamente no se
conocen? Qué bueno sería que en nuestras escuelas se estudiara la
vida y obra de Martí. Tenemos que recuperar la mirada, las manos,
los abrazos de nuestros pueblos. Hay que desaprender lo aprendido
para volver a aprender".
—Usted insiste mucho en el término "economía de la necesidad".
¿Qué significa eso?
"Hay una economía del mercado que es de la explotación, del
consumo. Tener más, poseer más, para ser menos. La economía de la
necesidad, te la explico con un ejemplo personal. Tenía un tío que
vivía en los montes y me enseñó a pescar. Yo estaba entusiasmado con
sacar peces, y él me dijo: "Saca solo lo que vas a comer, el resto
déjalo para mañana y para los demás".
—¿América Latina y la recién finalizada cumbre de la CELAC?
"Me alegro muchísimo de que Cuba asuma la presidencia de la CELAC.
La realidad es otra en el continente. Estamos llenos de nuevas
posibilidades que hay que saber potenciar".
—¿Optimista o pesimista?
"Si no fuese optimista no estaría luchando. Me gusta mucho una
frase del presidente boliviano, Evo Morales: "Dejemos el pesimismo
para días mejores". Mientras haya una sonrisa hay esperanza,
capacidad de resistencia, y ustedes los cubanos saben mucho de eso.
Por eso los llamo la Isla de la rebeldía y de la esperanza, de la
dignidad".