Al
menos 827 víctimas fatales se reportaron por la violencia armada en
Estados Unidos, tras la masacre del 14 de diciembre último en la
escuela primaria Sandy Hook, en Newtown, Connecticut, destaca hoy la
prensa.
A un mes de la matanza, en la cual perdieron la vida 26 personas,
de ellos 20 niños, la publicación Slate y la cuenta de Twitter @GunDeaths
difundieron el conteo, considerado además incompleto, pues solo
incluye muertes publicadas, por ejemplo, en los medios de
comunicación.
Entre los casos divulgados hay dos tiroteos, uno en Chicago y
otro en Las Vegas, que provocaron cada uno el deceso de una persona,
consignó un artículo el diario La Opinión.
La violencia por armas de fuego no parece haberse reducido aquí
desde la masacre de Newtown y en cambio las ventas de armamento han
repuntado notablemente desde entonces, señaló el reporte.
El rápido crecimiento en la comercialización de estos medios, que
escaló de forma significativa desde la reelección de Barack Obama y
se disparó luego del tiroteo del 14 de diciembre, muestra pocos
signos de atemperarse, indicó una nota del periódico The New York
Times.
Entretanto, representantes de la influyente Asociación Nacional
del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) descartaron que el
Congreso apruebe la prohibición para comprar rifles de asalto.
El vicepresidente Joseph Biden entregará mañana a Obama las
recomendaciones para una iniciativa legislativa que permita el
control de armas de fuego dentro del país, en cuyos inventarios
privados hay cerca de 310 millones de esos letales artefactos.