SANTO
DOMINGO.— Autoridades dominicanas del más alto nivel celebraron
varias reuniones para solucionar la situación creada en la parte
norte de la frontera con Haití, donde se impide el paso de personas
indocumentadas de este país.
En ese sentido, el presidente dominicano, Danilo Medina, convocó
a un encuentro al ministro de las Fuerzas Armadas, Sigfrido Pared, y
al director general de Migración, José Ricardo Taveras.
También participó en las conversaciones, de las cuales la prensa
desconoce hasta el momento su contenido, el embajador de Puerto
Príncipe, Fritz Cinéas.
Según Pared, no se permitirá que los haitianos concentrados desde
el pasado domingo en el puente sobre el río Masacre, próximo al
municipio dominicano de Dajabón, de la provincia homónima, crucen a
la fuerza la línea divisoria.
Por otra parte, una comisión conformada por organizaciones de la
sociedad civil dialogó en el despacho del ministro de Interior y
Policía, José Ramón Fadul, con funcionarios gubernamentales, bajo la
guía del viceministro de la Presidencia Luis Henry Molina.
La propuesta de conceder un documento administrativo transitorio
a los más de mil haitianos, que permita su paso a los lugares de
trabajo en el noroeste de Dominicana, fue bien recibida y ponderada
por el segundo grupo, informaron reportes periodísticos.
Durante estos días, a raíz de la medida, han ocurrido incidentes
violentos como lanzamiento de piedras e incendio de neumáticos a
ambos lados de la frontera.
Además, el personal del consulado dominicano en la ciudad
haitiana de Oanaminthe tuvo que ser evacuado a toda prisa hacia su
país por las amenazas de varias personas que se presentaron allí
molestas con la actual situación.
Los afectados son apoyados por el jesuita dominicano Regino
Martínez, coordinador de la organización no gubernamental
Solidaridad Fronteriza, quien considera firmemente que los haitianos
deben regresar a sus puestos laborales.
Ambas naciones ocupan la caribeña isla de La Española, y según
diversas fuentes entre uno y dos millones de haitianos viven en
Dominicana, donde trabajan mayoritariamente en la construcción, la
agricultura y servicios domésticos.
Taveras precisó a finales de noviembre pasado que su país tiene
registrados para residir de manera legal a nueve mil 385 haitianos.