KABUL — Al menos 250 oficiales de policía debieron acudir a tratamiento médico de urgencia en el distrito afgano de Marmal, provincia norteña de Balkh, para anular las consecuencias de un envenenamiento, según un informe obtenido hoy bajo condiciones de anonimato.

El reporte da cuenta que los agentes del orden comieron anoche en un complejo militar y luego comenzaron a sufrir los efectos de una sustancia tóxica.

Aún se desconoce la naturaleza del veneno inoculado a los uniformados y tampoco la información refiere sobre fallecidos.

A principios de 2012 unos 200 oficiales del Ejército afgano resultaron víctimas de igual acción, tras desayunar, y se disponían a participar en un ejercicio de entrenamiento en un campo de esta capital cuando comenzaron los síntomas de envenenamiento.