Situada en el curso de la ruta fluvial más larga de China, el río
Yangtsé, en la provincia de Hubei, esta infraestructura cuenta con
32 generadores capaces de manipular decenas de miles de metros
cúbicos de agua por segundo.
En el año recién concluido, el volumen de generación eléctrica
creció un 25 % con respecto al 2011 y representó el 24 % de la
electricidad total producida por plantas hidroeléctricas en el país.
Hasta diciembre, la planta obtuvo 629 mil 100 millones de kiloWatts
de electricidad, el equivalente a una reducción de casi 500 millones
de toneladas de dióxido de carbono.
La energía proveniente de las Tres Gargantas de China proviene de
fuentes limpias, es decir, no contaminantes del medioambiente, lo
cual se aviene con el propósito del país más habitado del planeta de
reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera.
También se conoció este martes que Beijing prestará más atención
al desarrollo de la industria biotecnológica, como una vía para
enfrentar dificultades nacionales relacionadas con el crecimiento de
la población, la seguridad alimentaria, la conservación energética y
la protección medioambiental.
De acuerdo con un comunicado del Consejo de Estado chino, el país
pretende duplicar el porcentaje que representa el valor añadido de
la producción del sector biotecnológico en el Producto Interno Bruto
de cara al 2015, comparado con el nivel alcanzado en el 2010.
Según el plan de desarrollo de la industria biotecnológica
presentado por el gabinete, la producción del sector deberá aumentar
a un ritmo medio anual de más del 20 % entre el 2013 y el 2015.
El Gobierno mejorará, además, las capacidades tecnológicas y de
innovación del sector para convertirlo en una industria pilar de
cara al 2020, fecha en la que China aspira a convertirse en una
sociedad moderadamente acomodada.