Los
rusos acogieron con alegría la noticia de que a finales de
diciembre nacieron entre cuatro mil 500 y cinco mil cachorros de oso
polar en el océano Ártico, según el ecólogo ruso Víctor Nikiforov.
Responsable del proyecto Patrulla de oso, de la fundación WWF
Rusia, Nikiforov sostuvo que esa cifra se basa en estimados de la
Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, que sitúa
la población mundial de esa especie entre 20 mil y 25 mil
ejemplares, repartidos en 19 sub poblaciones.
La comunidad de osos polares en el Ártico ruso se estima entre
cinco mil y seis mil animales (un 20-25 por ciento) a falta de datos
más precisos, puesto que las sub poblaciones de este depredador en
el territorio del país más extenso del planeta se encuentran entre
las menos estudiadas, subrayó la fuente.
Científicos y ecologistas afirman que los nacimientos de esta
especie suelen producirse a finales de diciembre, cuando en refugios
excavados en la nieve ártica las hembras paren criaturas de apenas
500 gramos de peso.
En menos de cuatro años los cachorros se convierten en
gigantescos depredadores terrestres, con más de tres metros de largo
y un peso de unos 750 kilogramos.
WWF Rusia instauró el proyecto Patrulla Oso hace cinco años,
consistente en estructurar grupos de voluntarios que siguen la
evolución de la población nacional de este animal, inscrito en la
Lista Roja de Especies en Peligro de Extinción.
Otro objetivo de estos patrulleros es luchar contra los cazadores
furtivos y llevar adelante programas de educación ambiental entre
los residentes de la cima helada del mundo.
Estudios realizados por paneles de la ONU, indican que debido al
deshielo del Ártico producido por el cambio climático, el hábitat de
los osos polares podría verse reducido en más de un 40 por ciento en
las próximas décadas.