Dos
cápsulas del tiempo con mensajes y objetos dirigidos a las
generaciones futuras han sido enterradas hoy en el patio de la sede
de la UNESCO en París con la intención de que no se reabran hasta el
año 2062.
Con motivo del Día Mundial de la Filosofía, creado por este
organismo "para impulsar esa disciplina que favorece el pensamiento
crítico e independiente y promueve la tolerancia y la paz",
ciudadanos de todo el mundo han enviado mensajes u objetos que
desean hacer llegar a quienes habiten la Tierra dentro de 50 años.
El organismo con sede en París señaló hoy que se trata de una
iniciativa "que sirve como recordatorio de que la solidaridad
intergeneracional es clave para una paz duradera".
En total, cerca de 300 mensajes escritos mayoritariamente por
niños y jóvenes de decenas de países han sido enterrados en dos
cilindros metálicos en un acto presidido por la directora general,
Irina Bokova, y al que han asistido niños de dos escuelas primarias
locales.
La mayoría de las notas guardadas en las cápsulas deseaban a las
generaciones del futuro un mejor entendimiento entre las culturas
que el que se da en el mundo actual, mientras que entre los objetos
se incluyeron teléfonos móviles o llaves USB con canciones en su
interior.
"El antídoto a la tendencia demasiado común de preocuparnos por
nosotros mismos es desarrollar desde niños el hábito de interesarse
por los otros. Esta actitud no solo evita obsesionarse con uno
mismo, sino que es de tremenda ayuda en cualquier etapa de la vida",
ha escrito la Nobel de Medicina Rita Levi-Montalcini en una de las
cartas.