JERUSALÉN, 21 de octubre.— Los activistas propalestinos del 
			velero Estelle acusaron a la marina israelí de emplear pistolas 
			Taser contra ellos al interceptar su embarcación el sábado, cuando 
			intentaban llegar a la sitiada Franja de Gaza con ayuda humanitaria 
			para los palestinos.
			"Emplearon aparatos que daban descargas eléctricas, aplicando lo 
			que se llama electrotortura a algunos de los activistas", dijo su 
			abogado Gaby Lasky a la AFP.
			Mientras, la coalición española Izquierda Unida (IU) condenó el 
			abordaje por Israel de la embarcación, añade PL.
			La coordinadora federal de IU en Valencia, Marga Sanz, expresó su 
			más enérgica repulsa por el asalto perpetrado por el Ejército 
			israelí al Estelle, integrante de la III Flotilla de la Libertad.
			El pueblo palestino tiene derecho a su supervivencia, a la ayuda 
			internacional y a un Estado propio, apuntó Sanz.
			A través de un comunicado, el eurodiputado y responsable de 
			Política Internacional de IU, Willy Meyer, denunció el asalto del 
			velero cuando se encontraba en aguas internacionales.
			Una vez más Israel atropella impunemente el derecho internacional 
			y hace prisioneros a los activistas de la flotilla, señaló Meyer, 
			quien instó a la alta representante para la política exterior de la 
			Unión Europea, Catherine Ashton, a poner en marcha todas las 
			iniciativas necesarias para lograr cuanto antes la excarcelación de 
			los pacifistas.
			La organización española Rumbo a Gaza reclamó, por su parte, la 
			liberación inmediata de los activistas de la III Flotilla de la 
			Libertad, así como la devolución de todas las pertenencias 
			requisadas, en alusión a las 41 toneladas de ayuda que transportaba 
			el Estelle.
			EL objetivo de la Flotilla era desembarcar en Gaza, sometida 
			desde el 2006 por Tel Aviv a un bloqueo terrestre, aéreo y marítimo, 
			para entregar a la población alimentos, medicinas y material escolar 
			y de construcción.
			A bordo del velero finlandés, fletado por el movimiento sueco 
			Ship to Gaza-Sweden, viajaban unos 30 pasajeros de Finlandia, 
			Suecia, Noruega, Canadá, Italia, Grecia, Israel y España, junto a 
			parlamentarios de algunos de esos países.
			La primera Flotilla de la Libertad a Gaza, en mayo del 2010, fue 
			también asaltada por el Ejército israelí, en una operación en la que 
			murieron nueve activistas turcos.