MADRID, 31 de
agosto.— España aprobó hoy la tercera reforma financiera en los ocho
meses que lleva en el poder el conservador Partido Popular (PP), que
incorpora las duras condiciones impuestas al país por Bruselas para
acceder a un multimillonario préstamo.
PL reporta que el Consejo de Ministros español dio luz verde a
los nuevos cambios en el sistema bancario, que elevan los requisitos
de solvencia y contemplan segregar los activos inmobiliarios
problemáticos en un denominado "banco malo".
La iniciativa, exigida por la Unión Europea (UE) antes de
desbloquear el rescate de hasta 100 mil millones de euros para
sanear el deteriorado sector financiero español, concede amplios
poderes al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria.
Con la nueva reforma, quinta que se realiza en los últimos tres
años, este fondo estatal pasará a estar controlado por el Gobierno y
podrá actuar tanto en las entidades que solo necesiten una pequeña
ayuda como en las que requieran una profunda reestructuración o una
verdadera liquidación.