Estela Hernández, presidenta del Comité de Distribución de la
Caravana, expresó su gratitud a todos los que contribuyeron con el
envío de la ayuda, que incluye ómnibus, equipos médicos y
computadoras.
Según declaró Hernández a la prensa, ahora distribuirán los
productos teniendo en cuenta las solicitudes de personas o
instituciones, y priorizando los casos que más lo necesiten.
Subrayó, además, que siempre tratan de que los donativos lleguen
a varios puntos del país, por el contenido no solo material sino
simbólico del cargamento, y la necesidad de que en todas partes se
conozca la labor de los Pastores por la Paz.
Así, en esta ocasión uno de los ómnibus se entregará a una
escuela de niños discapacitados en la localidad de Puerto Esperanza,
en Pinar del Río. Otro de los autobuses tiene como destino un hogar
de ancianos en el municipio capitalino de Marianao, y otro apoyará
el trabajo del Consejo de Iglesias de Cuba.