MADRID,
10 de agosto.— España atenderá a los extranjeros indocumentados
catalogados como enfermos crónicos y cobrará por su asistencia
médica a los países de origen, de acuerdo con los planes del
Ministerio de Sanidad. Así lo confirmó el director general de la
Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y
Farmacia, Agustín Rivero, según PL.
Conforme a los planes del Gobierno, los extranjeros que se
encuentran en esa nación ibérica y no coticen a la Seguridad Social
deberán abonar 710 euros al año a cambio de asistencia médica,
mientras aquellos mayores de 65 años pagarán 1 864 euros.
Tales costos resultan una verdadera fortuna, al alcanzar precios
difícilmente asequibles para aquellas personas foráneas en situación
irregular, desempleados o con bajos ingresos, en una coyuntura
marcada por la crisis económica, consideran agrupaciones de
inmigrantes.
No obstante, se enviará la notificación del costo de los cuidados
médicos a los países de origen de esos inmigrantes por la asistencia
sanitaria que se le ha prestado aquí, aseguró Rivero en
declaraciones a Radio Nacional de España. Para ello, el funcionario
citó la existencia de convenios de colaboración bilateral con otros
países en materia sanitaria.
Sin embargo, Rivero no aclaró qué pasará si no existe ese
convenio con el país de procedencia del implicado, o en casos de
naciones donde el tratamiento recibido en España no esté cubierto
por la sanidad pública.