El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó a la baja sus
previsiones para España, esperando ahora un retroceso del producto
interno bruto (PIB) de 1.7 por ciento en 2012 y de 1.2 por ciento en
2013, a causa de las nuevas medidas de rigor, y también advirtió
contra las tensiones que sufre el país en los mercados.
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En tanto, fuentes europeas revelaron que por primera vez España
reconoció que podría necesitar un rescate de la Unión Europea y del
Fondo Monetario Internacional para el conjunto de su economía por
300 mil millones de euros (366 mil millones de dólares) si sus
costos de endeudamiento siguen siendo insostenibles, según dijo un
funcionario de la zona euro.
"Las tensiones del mercado podrían acentuarse aún más y amenazar
el acceso al mercado", escribió el FMI en su informe anual sobre
España. Aunque señaló que el nuevo plan de rigor del jefe de
gobierno español, Mariano Rajoy, que incluye un alza del IVA de tres
puntos, a 21 por ciento, "está globalmente en línea con las
recomendaciones", serán necesarias a partir de 2014 "medidas
adicionales".
Hasta ahora el FMI preveía un retroceso del PIB español de 1.5
por ciento en 2012 y de 0.6 por ciento en 2013. Ahora, la cifra del
organismo supone una contracción de más del doble de la pronosticada
por Rajoy la semana pasada, cuando reconoció que España seguirá en
recesión el año próximo, pero calculó en 0.5 por ciento la
contracción de la economía.
Según el FMI, este empeoramiento de las perspectivas para 2013 es
directamente atribuible al impacto inmediato del duro ajuste
anunciado por el gobierno español y prevé que, como consecuencia, la
recesión se agrave en España.
"Todas las políticas de ajuste de gasto que se están tomando son
restrictivas y van en contra del crecimiento", afirmó Alberto
Roldán, de Inverseguros. "Subir la presión fiscal en un país con 25
por ciento de paro es absolutamente regresivo", criticó. Esta
austeridad desata un descontento social que crece cada día. Por lo
pronto, para el 15 de septiembre próximo está convocada una gran
manifestación en Madrid.
España planteó a Alemania pedir rescate
El anuncio de los programas de recortes y aumento de impuestos no
había bastado para calmar a los mercados y fue necesario que el
presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, afirmara
el jueves que la institución hará "todo lo necesario para salvar al
euro" para que las tensiones por fin se relajasen.
Aunque las palabras tranquilizadoras del presidente del BCE
relajaron el jueves la tensión en los mercados, la hipótesis de un
rescate global de la economía española, lastrada por la recesión y
el desempleo, gana terreno, pese a los desmentidos del gobierno.
"No va a haber un rescate, ni el rescate es una opción", insistió
hoy la vicepresidenta y portavoz del gobierno, Soraya Saénz de
Santamaría.
Sin embargo, en declaraciones a la agencia Reuters un funcionario
de la zona euro dijo que el ministro de Economía español, Luis de
Guindos, planteó la posibilidad de un rescate soberano a su par
alemán, Wolfgang Schaeuble, durante un encuentro en Berlín el
martes, cuando los costos de endeudamiento de España trepaban por
encima de 7.6 por ciento, dijo la fuente.
De ser necesario, el dinero se sumaría a los 100 mil millones de
euros ya acordados para apuntalar a los bancos españoles, llevando
los recursos de la zona euro a un punto de quiebre.
Schaeuble le respondió a De Guindos que no estaba dispuesto a
considerar un rescate antes de la entrada en operaciones del fondo
de rescate Mecanismo Europeo de Estabilidad, que se producirá antes
de fin de año.
"De Guindos habló sobre 300 mil millones de euros en el caso de
un programa completo, pero Alemania no estaba cómoda con la idea de
un rescate ahora mismo", dijo el funcionario a Reuters.
Mientras Schaeuble y De Guindos se reunían el martes, los costos
de endeudamiento de España alcanzaban su nivel más alto desde que el
país adoptó el euro, alcanzando 7.64 por ciento para los bonos a 10
años, nivel al que España no puede pedir prestado a los mercados en
forma sostenible.
Sin embargo, el presidente del BCE, Mario Draghi, dijo el jueves
que el banco central está listo para actuar para reducir los
intereses que debe pagar España y el rendimiento del bono a 10 años
bajó a 6.88 por ciento.
Los mandatarios de Alemania, Angela Merkel, y de Francia,
Francois Hollande, se movilizaron para tratar de evitar un colapso
en los mercados. Ambos tuvieron que salir a reforzar el anuncio del
jefe del BCE, y señalaron que sus países (las mayores economías de
la eurozona) "están profundamente apegados a la integridad de la
zona euro" y decididos a hacer todo para proteger a la unión
monetaria.
(Tomado de Cubadebate)