Las
pérdidas o fugas de agua en las conductoras, redes de distribución y
acometidas del interior de los inmuebles; destacan entre las
principales problemáticas que atentan contra la economía del país y
la calidad de los servicios de abasto de agua, confirmó este jueves
la presidenta del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH),
Inés María Chapman Wauhg.
Durante la presentación del informe sobre la gestión de ese
organismo, como parte de las actividades previas al Noveno Periodo
Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, la
titular explicó que la pérdida anual estimada es de 1 011 millones
de metros cúbicos, lo cual equivale casi a la capacidad de embalse
de la presa Zaza, la mayor del país.
Chapman Wauhg precisó que 16 % de toda el agua que se bombea se
pierde en las conductoras, 20 % en las redes de acueducto y 22 % en
las redes intradomiciliarias, lo que redunda en gastos innecesarios
que cada año el país realiza por un monto de 676 millones de pesos.
Con el objetivo de revertir esta situación, el INRH impulsa un
programa integral de construcción y rehabilitación de las redes, y
conductoras de abasto, el cual incluye los trabajos en las líneas de
distribución de agua potable en 11 ciudades, entre las que enumeró a
La Habana, Trinidad, Camagüey, Las Tunas, Holguín, Bayamo, Santiago
de Cuba, Guantánamo, Baracoa, y Nueva Gerona, y el alcantarillado
del Reparto San Pedrito, en Santiago de Cuba.
Este programa de rehabilitación de redes se sustenta en las
producciones de tres fábricas del país, donde se fabrican tuberías
de polietileno de alta densidad. Estos conductos, indicó, habían
permitido la ejecución —al cierre de mayo— de 3 246, 4 kilóme
tros de redes, más de la mitad de los cuales fueron instalados en
las ciudades de La Habana, Holguín y Santiago de Cuba.
Como parte de la estrategia trazada por el Instituto Nacional de
Recursos Hidráulicos para solucionar las pérdidas de aguas, se ha
establecido un programa progresivo de metraje, tanto para el sector
estatal, como el residencial, el cual propiciará el uso racional del
agua, y fomentará una cultura adecuada de consumo del líquido,
añadió.
"Con similar objetivo, también se valora la aplicación de nuevas
tarifas que incentiven al ahorro, propuestas que ya fueron
presentadas al Ministerio de Finanzas y Precios".
Chapman anunció, además, que el Instituto apuesta por la
recuperación de los sistemas hidráulicos interiores de la vivienda,
para lo cual se han realizado coordinaciones con los ministerios de
la Industria Sideromecánica y Comercio Interior, productores y
comercializadores de estos necesarios insumos.
Para materializar todas estas acciones el país ha destinado un
número considerable de recursos, explicó. Si en el año 2000 el monto
de las inversiones del INRH apenas sobrepasaban los 50 millones de
pesos, en el 2012 la cifra ya se acerca a los 400 millones.
Por otra parte, la directiva identificó entre los procesos
inversionistas más complejos, la construcción de cuatro trasvases
para conducir volúmenes de agua desde diferentes embalses, donde se
almacenan los escurrimientos en zonas de mayor pluviosidad. El
objetivo de estos trasvases es garantizar el suministro seguro de
agua a zonas de carestía relativa de este recurso, donde es
necesario respaldar los planes de la economía y el desarrollo de la
sociedad.
En las cerca de tres horas de debate sobre el tema, los delegados
realizaron más de 20 intervenciones en las que interpelaron a la
presidencia del INRH sobre la situación de los salideros, los cortes
y sellado de las calles —que no realizan o se hacen c
on mala calidad— demoras en la solución de averías u
obstrucciones en las redes de acueducto o alcantarillado, así como
el incorrecto acabado de las obras, e inversiones fuera de término o
que nunca se concluyeron.
Blanca Esther Ballester, diputada por la provincia de La Habana,
señaló la necesidad de facilitar la compra a la población de equipos
de bombeo o piezas de repuesto, que permitan la circulación del
agua, de manera especial, a los edificios multifamiliares.
Por su parte, Walter Gamboa, diputado por el guantanamero
municipio de San Antonio del Sur, abogó por una mirada más enfática
del INRH hacia las zonas rurales, de manera especial por aquellas
zonas semidesérticas y con problemas en el abasto y distribución de
agua.
Durante el encuentro también respondieron preguntas de los
diputados varios vicepresidentes del Instituto Nacional de Recursos
Hidráulicos y el jefe del Grupo Nacional de Acueducto y
Alcantarillado, Joel Quintana.