Las multitudinarias manifestaciones a lo largo del país coinciden
con la aprobación en el Congreso de los Diputados de un plan de
recorte por 65 mil millones de euros, que afectará fundamentalmente
a las clases trabajadoras.
El País informa que el gobernante Partido Popular (PP) votó la
medida en solitario, ante la renuencia del resto de los partidos
políticos, y con el escaño de Rajoy vacío, pues el mandatario
decidió no asistir al debate.
La indignación de los españoles desbordó las calles del país,
especialmente en la capital, donde los organizadores cifran en 800
mil el número de personas que secundaron el llamado de los
principales sindicatos del país y marcharon bajo el lema "Quieren
arruinar el país, hay que impedirlo, somos más".
El diario Público destaca que la crudeza de las políticas del
Gobierno ha motivado que organizaciones sociales, los indignados del
15-M y los sindicatos hayan hecho un "esfuerzo de unidad" para
plantarles cara.
Por otra parte, la grave crisis social que vive España —donde más
de cinco millones de personas carecen de empleo y uno de cada dos
jóvenes no cuenta con un puesto de trabajo—, ha disparado la cifra
de emigrantes. Según el Instituto Nacional de Estadística, 269 486
personas abandonaron el país durante el primer semestre del 2012, un
44,2 % más que en el mismo periodo del 2011.
Esta semana la guardia costera argelina interceptó una patera
(barco pequeño) con jóvenes españoles indocumentados que se dirigían
al puerto de Orán (norte) donde se estima que iban a solicitar
trabajo en las empresas ibéricas que están asentadas en ese país.