El sistema financiero estadounidense enfrenta hoy un nuevo escándalo con la declaración de quiebra de la casa de corretaje PFG Best, demandada por fraude y malversación de fondos de los clientes.

La entidad presentó una solicitud formal en Chicago para acogerse a la protección que ofrece la legislación vigente, lo cual implica que sus activos serán liquidados.

Según versiones de la prensa económica digital, las autoridades regulatorias habían formulado de manera previa una demanda ante los tribunales por fraude.

La acusación apunta a declaraciones falsas relacionadas con las cuentas bancarias al mencionar depósitos en exceso por unos 200 millones de dólares.

Mientras, el director general de la entidad Russell Wasendorf, se encuentra internado en un hospital de Iowa luego de haber tratado de suicidarse el lunes.

Los analistas mencionaron que la suma comprometida es significativamente inferior a los mil 200 millones de dólares malversados por la firma MF Global, la cual cayó en bancarrota a finales del 2011.

Las casas de corretaje tienen la función de recibir órdenes de compra y venta de contratos futuros, además de aceptar dinero o instrumentos financieros que sirvan para garantizar las operaciones.