Los hechos juzgados, dijo el tribunal en su resolución, son
delitos de lesa humanidad, implementados mediante una práctica
sistemática y generalizada de sustracción, retención y ocultamiento
de menores de edad, haciendo incierta, alterando o suprimiendo su
identidad.
Tales acontecimientos, agregó, ocurrieron en ocasión del
secuestro, cautiverio, desaparición o muerte de sus madres en el
marco de un plan general de aniquilación desplegado entre 1976 a
1983 con el argumento de combatir la subversión e implementando
métodos de terrorismo de estado.
Además de Videla, quien recibió así su tercera condena de cadena
perpetua por crímenes de lesa humanidad, fueron sancionados a 40
años de encierro el exalmirante Antonio Vañek y a 30 años el exjefe
del grupo de tareas 3.3.2 de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA),
Jorge Tigre Acosta.
Mientras, el exgeneral Santiago Omar Riveros fue condenado a 20
años de prisión, y el también exgobernante de facto Reynaldo Bignone
a 15, al igual que Víctor Gallo, responsables de la apropiación de
uno de los últimos nietos recuperado por las Abuelas de Plaza de
Mayo.
La audiencia de lectura de los fundamentos de la sentencia fue
fijada para el próximo 17 de septiembre, según confirmó el Centro de
Información Judicial.
El juicio por la causa Plan Sistemático comenzó en febrero del
pasado año y en las audiencias se ventilaron 35 casos de robos de
bebés, 20 de los cuales recuperaron su identidad y ahora brindaron
testimonio.
En el proceso prestaron declaración unos 400 testigos, entre
ellos víctimas de la apropiación y familiares, y por primera vez se
analizaron más de 30 hechos de apropiación ilegal de recién nacidos
de madres en cautiverio.
Entre quienes declararon estuvo el exembajador argentino en
Colombia y ex jefe del Ejército, Martín Balza, quien dijo que en lo
personal no tiene "ninguna duda" sobre la existencia de listas de
víctimas de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última
dictadura militar.
Balza, quien compareció por videoconferencia, reveló además que
por testimonios de médicos, parteras y enfermeras que leyó en la
causa, el robo de bebés durante la dictadura militar impuesta el 24
de marzo de 1976 era una práctica sistematizada.
El tribunal también escuchó testimonios como el de Macarena, la
nieta del poeta argentino Juan Gelman, que fue localizada en el año
2000 en Uruguay dónde nació mientras su madre estaba detenida, y que
se ha sumado a la celebración de las organizaciones humanitarias en
Buenos Aires.
"Es una sentencia histórica que confirma el plan sistemático de
robo de bebés y, en mi caso, se reafirman condenas de Videla y
Bignone, es muy positivo. Empezar a ver las caras de los
responsables es una señal de que la justicia avanza", ha comentado
en declaraciones a Efe.
En la misma línea se ha expresado Mariana Zaffaroni, quien
recuperó su identidad en 1993 y cuyo caso también ha sido expuesto
en el juicio. Esta "niña robada" asegura que la sentencia "tiene
significado no sólo en lo personal sino también como sociedad".
"Para cualquier ciudadano que vive en un país donde acciones como
éstas no quedan impunes con el paso del tiempo, representan una
garantía de que se hace justicia", ha afirmado Zaffaroni.
La denuncia judicial de esta causa fue radicada hace 15 años por
Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, una
organización que ha ayudado a 105 niños robados a recuperar su
identidad y según la cual todavía quedan por encontrar y devolverles
su identidad unas 400 víctimas de los robos de bebés.
Cientos de personas, que siguieron la lectura de la sentencia
desde pantallas gigantes a las puertas del tribunal, estallaron en
gritos de alegría al escuchar las sentencias.