Representantes de organizaciones sociales y grupos opositores
islamistas urgieron este sábado a las autoridades de Jordania a
tomar nota del creciente descontento popular por la situación de
pobreza, corrupción y falta de libertades políticas.
Activistas juveniles y de formaciones de izquierda y opositoras,
como el Frente de Acción Islámica (FAI), exigieron la renuncia del
primer ministro Fayez Tarawneh, cuya política de austeridad sólo
favorece a la clase acomodada, en detrimento de ciudadanos
ordinarios.
Los líderes opositores señalaron que la marcha de miles de
personas el viernes por Ammán y otras ciudades jordanas fueron otra
señal de alerta al rey Abdulah II para que termine de implementar
medidas que respondan a las expectativas de la mayoría.
Al respecto, consideraron que prevalece una desconexión entre el
círculo íntimo de asesores del monarca hashemita y las calles
jordanas, de ahí que en las marchas de ayer coreaban déjen el
palacio y vean cómo viven los jordanos, además de reformas, cambios,
democracia.
Más de dos mil 500 personas desafiaron ayer las altas
temperaturas y el sol y salieron a manifestarse en distintas
regiones del reino contra el alza de los precios, además de exigir
un cambio político radical y reformas constitucionales.
Además de combatir la corrupción que afecta a las altas esferas
de poder, incluidos allegados del rey Abdulah, los inconformes
reclamaron modificar el sistema de gobierno de forma que la mayoría
parlamentaria pueda designar el jefe del Ejecutivo, en lugar de que
sea el monarca.
En lugar de alzar los precios, juzguen a los corruptos. Reforma
de la Constitución y dejen al pueblo ver la luz, se leía en varias
vallas y pancartas de los manifestantes, incluidos líderes del
influyente FAI.
Pocas semanas después de jurar como primer ministro, en mayo
pasado, Tarawneh elevó los precios del combustible, la electricidad
y otros bienes con el alegado propósito de cubrir un déficit de tres
mil millones de dólares en el presupuesto de este año, de 9,6 mil
millones, señaló Prensa Latina.
No pedimos imposibles, tenemos el derecho a ver reformas y a no
cesar las protestas hasta lograr nuestras metas, reclamó el
exdiputado islamista Jaafar Hurnai.
Entre los manifestantes que ayer hicieron una sentada frente al
parlamento muchos gritaban pan, libertad y justicia social, al igual
que hicieron miles de jordanos en ocho de las 12 provincias del
país, incluidas Irbid Karak y Tafeilh.