La Comunidad de Madrid, administrada por el conservador Partido
Popular (PP) que gobierna España, anunció hoy una reducción salarial
de 3,3 por ciento para sus casi 200 mil empleados públicos y una
subida de impuestos.
El Ejecutivo autonómico aprobó este jueves una modificación de
sus presupuestos para 2012, que incluye un ajuste de mil 45 millones
de euros entre recortes del gasto y nuevos ingresos, con el fin de
cumplir la meta de déficit del 1,5 por ciento del Producto Interno
Bruto (PIB).
Dentro del tijeretazo, decretado por la presidenta regional,
Esperanza Aguirre, correligionaria del jefe del Gobierno español,
Mariano Rajoy, se incluye una rebaja del 10 por ciento en los
sueldos de los cargos políticos y personal de confianza.
Además, a los funcionarios interinos de esta comunidad autónoma
que no sean docentes o asistenciales, el salario y la jornada se les
bajará un 10 por ciento.
En el área de la salud, en la que la administración de Rajoy ya
aplicó una drástica poda de siete mil millones de euros, Madrid
suprimirá prestaciones que no estén incluidas en la cartera
nacional, como la vacuna del neumococo o los tratamientos contra el
tabaquismo.
En el capítulo de ingresos, Aguirre sacará a concurso público la
instalación de peajes en algunas carreteras y creará o modificará al
alza más de 70 impuestos locales.
Madrid, Valencia y Castilla y León, tres regiones gobernadas por
el PP, son responsables de la última desviación del déficit público
de España en 2011, que en mayo fue revisado al alza del 8,5 al 8,9
por ciento del PIB, frente al objetivo del 6,0 por ciento.
Tras conocer los recortes, los sindicatos estatales anticiparon
que se reunirán para estudiar la convocatoria de movilizaciones, en
un sector que ya vio contraída su paga un cinco por ciento en mayo
de 2010 por el anterior gobierno del Partido Socialista Obrero
Español, informó