España colocó hoy dos mil 74 millones de euros en tres emisiones
de deuda pública, en una subasta en la que se vio forzada a pagar
más para poder financiarse en los mercados, refirió Prensa Latina.
El Tesoro Público superó el importe máximo previsto para la
emisión, ya que esperaba captar entre mil y dos mil millones de
euros, pero debió incrementar una vez más los intereses, ante la
incertidumbre sobre la solvencia del sistema financiero español.
No obstante, analistas subrayaron que una cierta mejora del clima
financiero en las últimas jornadas, con una reducción de la prima de
riesgo desde sus recientes máximos históricos, evitó que la
tesorería estatal se viera obligada a pagar aún más por su
financiación.
En bonos a dos años con cupón del 3,30 por ciento y vencimiento a
31 de octubre de 2014, la institución emisora captó 638 millones de
euros con un tipo marginal del 4,48 por ciento, frente al 3,52 por
ciento de la anterior puja, celebrada el pasado 19 de abril.
Por su parte, en papeles a cuatro años, con fecha de vencimiento
del 31 de octubre de 2016, el importe adjudicado fue de 825 millones
de euros con una rentabilidad del 5,44 por ciento, por encima del
4,36 por ciento de la licitación del 4 de abril último.
En obligaciones a 10 años (31 de enero de 2022), la institución
emisora colocó 611 millones de euros con un interés marginal del
6,12 por ciento, frente al 5,77 por ciento de la subasta del 19 de
abril.
Esta emisión, principal referencia, se quedó cerca de un punto
por debajo del 7,09 por ciento al que se adjudicó deuda a 10 años en
noviembre de 2011, su nivel más alto desde 1997.
Se trata de la primera puja del Tesoro después de las fuertes
tensiones de la semana pasada, que catapultaron a la prima de riesgo
a niveles récord desde la entrada en el euro y dispararon los
rendimientos de la deuda pública española en el mercado secundario.
Sin embargo, la prima parece haber dejado atrás el umbral de los
500 puntos básicos, tras la posible ayuda que recibirá España para
sanear su problemático sector bancario y el mensaje del Banco
Central Europeo sobre su disposición a bajar de nuevo los tipos en
julio.
La tesorería estatal no volverá a someterse al escrutinio de los
mercados hasta el 19 de junio, cuando subastará letras a 12 y 18
meses.
Además, celebrará otras dos subastas en el sexto mes del año: el
21 de junio (obligaciones) y el 26 de junio (letras a tres y seis
meses).
A juicio de analistas, entre los factores que permitieron al país
cerrar su emisión de hoy con una aceptable subida de la rentabilidad
figura el hecho de que Alemania parece estar dispuesta a ceder a las
exigencias de aceptar un rescate de la banca sin pasar por el
Estado.
El interés que España debe pagar a los inversores por la compra
de su deuda soberana, lo que se conoce como prima de riesgo, se
estrechaba en las últimas horas hasta situarse por debajo de los 500
puntos básicos.