Al menos diez combatientes islámicos, incluyendo dos
comandantes, fueron abatidos en un ataque de dos aviones no
tripulados del ejército estadunidense, el segundo en menos de 24
horas, en la conflictiva zona tribal del noroeste de Pakistán.
Según los informes de las autoridades locales, los
aviones atacaron una casa en el distrito de Wana en la región tribal
de Waziristán del Sur, fronteriza con Afganistán, donde se presume
se celebraba un velatorio de un comandante asesinado la víspera en
otro bombardeo.
Dos funcionarios de inteligencia paquistaníes
dijeron que cuatro misiles fueron disparados en el pueblo de Mana
Raghzai cerca de la frontera con Afganistán, reportó el canal local
de noticias Dawn News, en su versión digital.
Dos aviones teledirigidos, conocidos como "drones",
participaron en la ofensiva aérea, el primero disparó dos misiles
contra una casa seguido por el otro cuyo objetivo fue un automóvil
cerca del domicilio atacado.
No hubo detalles sobre cuántas personas murieron en
la casa asediada y en el vehículo, aunque las autoridades locales
llegaron al lugar después del ataque y comenzó la operación de
rescate.
En el momento del bombardeo, presuntos militantes se
reunieron para ofrecer sus condolencias al hermano de un comandante
asesinado durante un ataque de otro avión "drone" el sábado pasado.
El ataque de este domingo en Waziristán del Sur fue
el segundo con más muertos y el sexto en dos semanas desde la Cumbre
de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sobre en
Afganistán el mes pasado en Chicago.
Pakistán ha pedido a Washington detener los ataques
con aviones no tripulados, sin embargo la administración de la Casa
Blanca ha seguido adelante con el programa de aviones no tripulados
que se considera vital para luchar contra Al Qaeda y los talibanes.
El parlamento de Pakistán aprobó en fecha reciente
por unanimidad una resolución en contra de los ataques con aviones
no tripulados, luego que en varias bombardeos han muerto civiles.