Un suceso teatral trascendente resultó el estreno de La
pintura y otros lugares, creación colectiva inspirada en la obra
del pintor francés Alain Kleinmann, por el grupo Espacio Teatral La
Aldaba, dirigido por Irene Borges.
Llevada a la escena en la Sala Tito Junco del Centro Cultural
Bertolt Brecht, donde permanecerá, de viernes a domingo, los
próximos fines de semana, Kleinmann, quien estaba entre el público,
declaró a la AIN que era genial cómo sus cuadros podían encarnarse
en el teatro.
Dijo que esta pieza posee una forma tan imaginativa y tan cercana
al espíritu de su creación que nunca pudo pensar, que su obra,
realizada en la soledad de su estudio parisino, pudiera inspirar una
pieza colectiva de tal envergadura.
El artista considera que con este estreno se le abre una nueva
puerta a su creatividad, porque Irene Borges y sus actores
encontraron una sutil relación entre las artes plásticas, los
textos, la danza, la música y la visualidad del espectáculo.
Es algo diferente, particular, como hablar donde otros no han
dicho nada, subraya este pintor, quien ha expuesto con éxito en el
Museo Pompidou en París, el Palacio Velásquez de Madrid, la Galería
Teatriakov de Moscú y el Museo Nacional de Bellas Artes en La
Habana.
Una instalación performática convirtió a la Sala Tito Junco en un
laberinto de sorpresas, las proyecciones sobre telas
semitransparentes y el vestuario de los actores, la poética
sugestiva y la provocadora visualidad, hacen de La pintura y
otros lugares, un acontecimiento que el público no debe perder.