En sendas fructuosas visitas a la India y Pakistán esta semana,
el canciller iraní, Ali Akbar Salehi, recibió de los líderes de esos
países garantías de que los nexos bilaterales seguirán en ascenso
pese a las presiones de Occidente, dio a conocer Prensa Latina.
El primer ministro indio, Manmohan Singh, y el presidente
pakistaní, Asif Ali Zardari, respondieron además afirmativamente a
la invitación que les cursó el presidente Mahmoud Ahmadinejad a
través de Salehi, para que asistan a la XVI Cumbre del Movimiento de
Países No Alienados, con sede en Teherán, en agosto próximo.
Ambas respuestas cobran mayor importancia en tanto afloraron a un
mes escaso de la entrada en vigor de las sanciones con que Estados
Unidos y la Unión Europea (UE) pretenden asfixiar económicamente a
Irán por su decisión de seguir desarrollando un programa nuclear al
que atribuyen fines militares.
Además de con Singh, Salehi se reunió además en Nueva Delhi con
su colega S. M. Krishna, quien le reiteró que la India tiene
decidido fomentar los lazos económico-comerciales y de cooperación
con el Estado persa.
En conferencia de prensa conjunta, Krishna recalcó que su país
acata las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, pero
rechazará otras que se decidan de manera unilateral o regional.
En un mundo globalizado, estas acciones pueden tener un fuerte
impacto en los mercados, señaló al alertar a las entidades indias
que estas medidas (las de Washington y Bruselas) no deben afectar
nuestros legítimos intereses comerciales.
Krishna subrayó que Irán es un importante vecino, un crucial
socio comercial de la India, y una importante fuente de nuestros
suministros de energía.
También lo describió como una puerta de entrada de la India a
Asia Central y, tras resaltar el mutuo interés por la estabilidad en
esa región y el Golfo, dijo que ambas naciones enfrentan las
amenazas del terrorismo y el extremismo.
Salehi apuntó que aunque el comercio bilateral ronda los 16 mil
millones de dólares, la suma no es proporcional al potencial de los
dos países, por lo que estos aspiran a incrementarla en el futuro
inmediato, y recalcó que Teherán es y será un socio fiable como
suministrador de energía para la India.
El gigante asiático realiza en Irán alrededor de 10-11 por ciento
de sus compras de petróleo, pero Occidente pretende que las
disminuya. En una reciente visita aquí, la jefa de la diplomacia
estadounidense, Hillary Clinton, hizo de ese su tema más recurrente.
Este estará en lo más alto la agenda cuando Krishna viaje en los
próximos días a Washington para una nueva ronda del diálogo
estratégico India-Estados Unidos.
Salehi también actualizó a su homólogo sobre las recientes
conversaciones de Irán con el P5 +1 en Bagdad sobre el programa
nuclear de su país.
Krishna señaló que la India siempre ha sido partidaria de
resolver ese asunto mediante la diplomacia y apuntó que el Organismo
Internacional de la Energía Atómica es el mejor foro para abordar
los aspectos técnicos de la cuestión.
En Pakistán, entretanto, el presidente Zardari transmitió a
través de Salehi un mensaje de agradecimiento a Ahmadinejad por
invitarlo a la Cumbre de los NOAL y expresó su confianza en que el
evento será una importante plataforma para el intercambio de puntos
de vista sobre cuestiones de interés mutuo.
Zardari expresó su satisfacción por la ascendente trayectoria de
las relaciones entre ambos países y se pronunció por nuevas medidas
que garanticen el mutuo objetivo de elevar el comercio bilateral a
10 mil millones de dólares anuales.
En ese contexto, reafirmó el comprometimiento de Pakistán con la
ejecución de los megaproyectos con Irán, incluido un gasoducto
valorado en varios de miles de millones de dólares, la construcción
de la carretera Nashki-Dalbandin y la mejora de la línea ferroviaria
Quetta-Taftan.
El mandatario también se pronunció por la creación de mecanismos
eficaces para evitar incidentes adversos en la frontera y recalcó
que las dos naciones deben trabajar para conjurar amenazas comunes
como el terrorismo y el extremismo.
Aseguró, además, que Pakistán e Irán están llamados a jugar un
gran papel en la promoción de la estabilidad, la paz y el desarrollo
en Afganistán.