DAMASCO, 23 mayo.— Al menos 22 médicos, enfermeros y personal de
la salud murieron a causa de actos de violencia de grupos
terroristas, informó hoy Wael Halaki, ministro sirio del ramo.
Durante un encuentro con el jefe del Departamento de Salud del
Comité Internacional de la Cruz Roja en Ginebra, Valery Sasin, y con
el presidente de la delegación del Comité en Damasco, Marianne
Gasser, el titular agregó que 42 empleados del sector resultaron
heridos a causa de estas acciones.
Halaki aseguró que la violencia terrorista afecta a hospitales,
instalaciones sanitarias y transporte de socorro casi a diario, y es
frecuente el secuestro de personal del sector.
Agregó que las bandas armadas, que reciben apoyo del exterior,
atacaron desde el 10 de abril dos hospitales en Homs y Deir Ezzor,
cuatro centros de salud situados en cuatro provincias y 16
ambulancias.
En su accionar los grupos irregulares sabotearon al menos 24
hospitales, de los cuales, tres se encuentran ya fuera del servicio,
y 84 centros sanitarios, además de 199 ambulancias y vehículos de
apoyo logístico, 95 de los cuales quedaron totalmente averiados,
dijo.
Denunció además que el sector de salud enfrenta retos y
dificultades ocasionadas por el bloqueo económico impuesto por los
países occidentales.
Por su parte, Gasser declaró que el objetivo de su visita es
hacer una evaluación de las necesidades sanitarias de los sirios y
enfatizó que el sector de la salud se ve gravemente afectado por los
actos terroristas, hecho considerado como una violación a los
derechos humanos.