WASHINGTON, 22 de mayo.— Estados Unidos persiste hoy en su política
de imponer sanciones contra la República Islámica de Irán para
frenar su programa nuclear con fines pacíficos, informó PL.
El Senado aprobó en la noche del lunes, en una votación a viva
voz, medidas adicionales que buscan reforzar el cerco impuesto a la
nación persa desde meses anteriores, sobre todo contra su sector
financiero y petrolero, reportó el diario The Wall Street Journal.
La iniciativa faculta al presidente Barack Obama para sancionar a
cualquier país o compañía que apoye a la nación persa en su programa
de enriquecimiento de uranio, invierta en sus recursos petrolíferos
o provea tecnologías o medios para dichas actividades.
Asimismo, el proyecto legislativo exige a las compañías que
cotizan en Wall Street revelar datos sobre negocios con empresas
iraníes.
La medida, no obstante, necesita todavía ser reconciliada con un
proyecto de la Cámara de Representantes, antes de que llegue al
escritorio del presidente para ser rubricada, precisó la
publicación.
A finales de marzo, Obama dio luz verde a la aplicación de
sanciones contra Irán como parte de las presiones de las naciones
occidentales, que buscan impedir el programa nuclear iraní.
Dichas disposiciones entrarán en vigor en junio próximo y prevén
castigar a instituciones financieras que mantengan relaciones con el
Banco Central iraní, organismo mediante el cual se gestiona el
comercio petrolero de la nación persa.