ALFONSO NACIANCENO

El debut en la Liga Mundial de Voleibol —incluida la victoria sobre Rusia, oro del 2011— lejos de crear falsas expectativas, debe contribuir a mantener los pies sobre la tierra.

El bloqueo, un tema preocupante en el equipo.

Cuba hoy expresa una excelente forma física, ha crecido en la defensa del campo, su saque fuerte hace daño (Wilfredo León y Fernando Hernández), pero sus posibilidades de mover al banco están constreñidas en un certamen donde todavía Estados Unidos, Brasil, Serbia y los mismos rusos no han mostrado toda su fuerza.

Solo un cambio probado —que explicaremos más adelante— tenía el mentor Orlando Samuels antes de sustituir frente a Rusia al central David Fiel por Danger Quintana, pues su reserva la integran cuatro jóvenes que apenas combatieron en el Preolímpico de Long Beach, Estados Unidos. A otro excadete, el opuesto Yordan Bisset, lo empleó únicamente para efectuar el servicio por Isbel Mesa, y el muchacho, presionado, falló tres de cinco intentos contra Serbia.

BATALLAR ENTRE GIGANTES

El cuadro dispone de solo una opción de cambio segura para intentar reaccionar cuando va en desventaja: sustituir al auxiliar Rolando Cepeda por el veterano Henry Bell a partir de los segundos sets (como vimos contra Japón y Serbia), momentos en los que bajó su rendimiento. Después Bell abrió de cara a Rusia.

El cubano, de 1,88 metros de altura, dijo a Granma que mantenerse activo entre gigantes es muy difícil: "Si mis compañeros entrenan un ejercicio de pesas o en el terreno, yo lo repito el doble o el triple de veces, porque la exigencia es tan grande que no me permite administrar las energías, siempre debo explotarme al máximo".

La obligada renovación a la que ha estado sujeta esta selección tras ganar la medalla de plata en el Mundial de Italia’10 —el 50 % de sus regulares causó baja por motivos personales— trae consigo que los actuales seis ocupantes de la cancha no disfruten de un instante de descanso y quizá solo tengan algunos minutos de reposo si en los finales de un set acusan una desmesurada desventaja, sin oportunidades de recuperación.

BLOQUEADORES INEXPERTOS

Desde el 2011 preocupan los bloqueadores centrales. Isbel Mesa hoy emprende una ruta de consolidación, aunque todavía debe crecer técnicamente; mientras David Fiel estuvo perdido frente a Japón y Serbia, sin leer a tiempo las intenciones del pasador rival y sin meter los brazos y las manos en dirección al terreno, causa de que cierta cantidad de los remates no fueran bloqueados.

El acomodador Yoandry Díaz —con predilección por pasar hacia las esquinas— ha de diversificar su trabajo, utilizar más el centro de la malla y sacarles provecho a las fintas, pero no como en el cuarto parcial contra Serbia, que debajo 25-26 tiró un balón y lo estaban esperando sus contrarios. Conclusión: 25-27, sin posibilidad de decidir en un quinto tiempo.

Aquí entroncamos otro tema: los cubanos tienen dificultades para definir en las conclusiones de los parciales, sobre todo a partir del tanto 20, cuando precisan de mayor aplomo y convicción de qué deben hacer. El asunto es soluble: jugar más partidos de calidad como preparación, única forma de compenetrar a los hombres en la antesala de eventos importantes como la Liga Mundial y el próximo Preolímpico de Alemania, del 8 al 10 de junio.