La policía italiana detuvo hoy en varias regiones del país a 28
personas que trabajaban para el capo mafioso Elio Diana, jefe del
clan Casalesi, considerado el más poderoso de la Camorra napolitana.
Según un comunicado de la Dirección Antimafia de Nápoles, esas
personas enfrentan cargos por asociación mafiosa, extorsión
agravada, lavado de dinero, manejo de bienes robados, porte de
armas, fraude, lesiones graves y falsificación.
"Las investigaciones permitieron determinar que el clan de los
Casalesi además de dar apoyo financiero y legal a sus integrantes
arrestados tiene la capacidad, pese a las continuas detenciones, de
renovar sus filas", agregó esa entidad.
Entre los encartados figura un funcionario de un banco veneciano
que desvió cuatro millones de euros a favor de la banda,
caracterizada por operar de forma inescrupulosa y brutal.
Diana dirigía desde la cárcel a su clan, cuyos miembros
trabajaban también por incrementar su nómina.
En diciembre pasado, la policía italiana capturó en la región de
Campania (sur) a Michele Zagaria, apodado Capastorta, otro capo de
la mafia Casalesi y prófugo de la justicia.
Las autoridades capturaron al individuo y a otras 50 personas en
un departamento subterráneo ubicado en su natal Casapesenna, durante
una maniobra que requirió ayuda de excavadoras para llegar al
escondite construido debajo de una vivienda.
Zagaria fue condenado a cadena perpetua por asociación mafiosa,
homicidio, posesión ilegal de armas y extorsión, entre otros
delitos. La ministra de Interior, Anna Maria Cancellieri, calificó
el arresto del capo como un triunfo para el Estado y un golpe duro
para la Camorra napolitana, que con la Cosa Nostra en Sicilia, la
Ndrangheta en Calabria y la Sacra Corona Unita en Apulia, controlan
las actividades ilícitas en el sur del país.
Capastorta, prófugo de la justicia desde 1995, era uno de los
hombres más peligrosos de Italia y tenía una orden de captura
internacional desde 2000.
Su clan tiene alta influencia en la política y el comercio local,
con el cual ingresa casi 30 mil millones de euros anuales, según la
dirección nacional antimafia.
También está vinculada a la extorsión, narcotráfico, contrabando
de personas y de armas, apuntó Prensa Latina.