El
Gobierno de Guatemala se declaró hoy en "alerta naranja"
(vigilancia) por la erupción del volcán de Fuego, ubicado a 60
kilómetros al sur de la capital, que esta madrugada incrementó su
actividad y lanzó columnas de lava y ceniza que alcanzan los 300
metros de altura.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de
Desastres (Conred) dijo en un comunicado que el coloso entró "en una
fase de erupción efusiva" y levantó una fuente incandescente sobre
el cráter de aproximadamente 300 metros de altura.
Según el informe, la actividad volcánica "está
generando constantes explosiones de aproximadamente 20 a 30 por
minuto que levanta columnas de ceniza a 1.200 metros de altura sobre
el cráter en dirección sureste, sur y suroeste del complejo
volcánico que se extiende por 30 kilómetros aproximadamente".
Hasta el momento los cuerpos de socorro no reportan
víctimas ni daños como consecuencia de la actividad volcánica, pero
advirtieron que las poblaciones de los departamentos de Escuintla,
Sacatepéquez y Chimaltenango deben estar alertas.
La "alerta naranja" decretada obliga a todas las
instituciones de protección civil y cuerpos de socorro a permanecer
en apresto para reaccionar en el momento que sea necesario.
La Conred recomendó a la Dirección General de
Aeronáutica Civil "tomar las precauciones con el tráfico aéreo", y
evitar los vuelos en un radio aproximado de 40 kilómetros del
perímetro del volcán Fuego, al tiempo que ordenó cerrar el paso de
vehículos en la Ruta Nacional 14, la cual conduce de la capital
hacia el sur del país.
Según un informe del Instituto Nacional de
Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) la
actividad volcánica "puede durar varias horas o incluso aumentar
pudiendo generarse flujos piroclásticos -nubes ardientes con ceniza
a altas temperaturas- por otras barrancas del complejo volcánico".
Con una altura de 3.763 metros sobre el nivel del
mar, el volcán de Fuego es uno de los más impresionantes de
Centroamérica por su constante y violenta actividad.