Tras la reunión, Hollande subrayó la importancia de las
relaciones entre ambos países y destacó que son "estrechas,
equilibradas y de respeto mutuo". Nuestro deseo común "es trabajar
juntos por el bien de Europa, de manera que llevemos con nosotros al
resto de las naciones", agregó.
AFP informa que el Presidente francés reiteró su exigencia de que
el pacto fiscal de la UE se vea enriquecido con medidas para
fomentar el crecimiento y demandó que en la cumbre informal del 23
de mayo próximo se hable de la iniciativa para la creación de
eurobonos, lo cual Merkel rechaza tajantemente.
Por otra parte, ambos mandatarios se refirieron a la situación
que atraviesa la nación helena. "Queremos que Grecia permanezca en
el euro. Sabemos que la mayoría de los griegos lo quieren", apuntó
Merkel, quien recordó que la moneda única "no solo es un proyecto
monetario, sino político".
El gobernante galo llegó a la sede del Gobierno germano con hora
y cuarto de retraso, ya que se vio obligado a cambiar de avión en
París, después de que el aparato en el que emprendió inicialmente
viaje fuera alcanzado por un rayo, reporta EFE.
Esta es la primera visita al exterior de Hollande tras ser
investido como el séptimo jefe de Estado de la V República francesa
y el vigésimo cuarto en la historia republicana del país europeo.
En su primer discurso oficial, Hollande prometió crear una nueva
vía para Europa que combine las medidas de equilibrio de las
finanzas públicas con políticas que estimulen el crecimiento de la
economía.
"Mido el peso de los problemas que debemos enfrentar: una deuda
masiva, un crecimiento débil, un desempleo elevado, una
competitividad degradada, una Europa que sufre para salir de la
crisis", enumeró, pero subrayó que no hay razones para la fatalidad
si se movilizan todas las fuerzas.