Después
de transcurridos unos quince días de los hechos, el equipo
antiterrorista y agentes de la Oficina Federal de Investigaciones
(FBI) a cargo del esclarecimiento de los hechos, no han detenido ni
interrogado a nadie en relación con el incendio que destruyó una
agencia de vuelos chárter a Cuba, según la prensa local.
Un informe del Departamento de Bomberos de Coral Gables, un
municipio de Miami, confirma que el incendio que destruyó las
oficinas de la agencia Airline Brokers, especializada en los viajes
a Cuba, situada en 815, avenida Ponce de León de esta localidad, era
"intencionado", evitando usar la palabra "atentado" que corresponde
a este acto criminal.
El FBI de Miami es conocido por su colaboración con los círculos
que promueven el terrorismo, por tolerar la presencia en Miami de
conocidos grupos terroristas tales como Alpha 66 y Comandos F-4 que
mantienen abiertamente locales de trabajo y de reunión, y por
conservar lazos con individuos identificados por sus actividades de
terrorismo.
La propietaria de Airline Brokers, Vivian Mannerud, declaró a los
bomberos en el propio sitio de la deflagración que había sido objeto
de "actividades hostiles debido a la naturaleza de su clientela",
según precisa el informe.
Un investigador del FBI presente, aparentemente al tanto de este
precedente, confirmó la información al redactor del informe.
Coral Gables, zona exclusiva donde se encuentra la agencia
incendiada, tiene como alcalde a James Cason, un exjefe de la
Sección de Intereses de Estados Unidos en Cuba, y es lugar de
residencia de numerosos contrarrevolucionarios cubanoamericanos
conocidos.
Los investigadores señalan tres focos de incendio en tres lugares
distintos del local comercial. Una fosforera desechable fue recogida
a poca distancia de la fachada.
El incendio "intencionado" fue tan intenso que la oficina,
recientemente renovada, quedó "pulverizada, hecha escombros y
cenizas".
Fundada en 1982, la agencia Airline Brokers transportó 300
peregrinos a Cuba con motivo de la visita del papa Benedicto XVI, a
fines de marzo pasado, en colaboración con las autoridades
religiosas de Miami.
El atentado ocurrió el mismo día del primer aniversario de la
muerte del terrorista internacional Orlando Bosch, fallecido en
Miami el 27 de abril del 2011.