Luego de la entrada en vigor, el pasado 10 de noviembre, del
Decreto-Ley 288, relacionado con las formas de transmisión de
propiedad de la vivienda, la inscripción de los títulos de propiedad
de los inmuebles muestra un notable incremento en todas las oficinas
dedicadas a esa actividad, indicó Aniuska Puente Fontanella,
especialista de la Dirección de los Registros de la Propiedad
Mercantil y del Patrimonio, del Ministerio de Justicia.
Según la funcionaria, al cierre del primer trimestre fueron
inscritos 70 mil 200 inmuebles aproximadamente, de ellos 56 mil 500
pertenecientes a particulares y 13 mil 700 a entidades estatales,
cifras muy superiores a las reseñadas en igual periodo del
año anterior, lo cual denota cuánto aumenta la percepción de la
importancia del registro, como garante de la seguridad jurídica en
todo lo que a materia inmobiliaria se refiere.
No obstante, reconoció que aún muchas personas asumen la
inscripción como un trámite más, sin reparar en el beneficio
obtenido por el titular de la propiedad: se acredita ante la ley
como dueño legítimo de su inmueble y gana protección legal en el
ejercicio de cualquier acto de trasmisión de dominio.
Además, abundó en los requisitos exigidos para la realización de
los trámites en dichas oficinas: descripción y ubicación correctas
de la casa, medidas y linderos exactos, propietario actual.
Asimismo, añadió que, luego de la primera inscripción del título, la
actualización sistemática es obligatoria. "Tras la ocurrencia de
algún acto traslativo de la propiedad o la realización de
transformaciones constructivas en el inmueble, es preciso concurrir
al registro".
Puente Fontanella también se refirió al desarrollo del programa
informático en los registros (estos últimos existentes en cada
municipio), con el fin de hacer más ágil y eficiente el desempeño en
estas oficinas, acortar los plazos establecidos para su gestión y
humanizar el trabajo. Este programa se irá generalizando de acuerdo
con la disponibilidad tecnológica".