La misión de supervisión de Naciones Unidas en Siria suma ya 145
integrantes militares, casi la mitad de los 300 autorizados por el
Consejo de Seguridad, confirmó este viernes el vocero oficial de la
ONU, Martin Nesirky.
En su encuentro habitual con los corresponsales en Nueva York, el
portavoz dijo que 145 observadores están sobre el terreno e
incorporados a los trabajos del contingente, en especial a la
realización de patrullajes para vigilar la situación, reporta Prensa
Latina.
A esos supervisores se suman otros 56 civiles que respaldan a los
uniformados en el cumplimiento de su tarea, al mando del general
noruego Robert Mood.
Se espera que el total de los miembros de la misión estén en
territorio sirio a finales de mayo, según precisó el pasado martes
el enviado especial de la ONU para Siria, Koffi Annan, al informar
al Consejo de Seguridad sobre la marcha de su gestión.
El destacamento de observadores tiene la tarea de monitorear el
plan de seis puntos acordado por Annan con el gobierno sirio para el
cese de la violencia en el país y avanzar hacia un arreglo pacífico
del conflicto.
En los últimos días, diversas figuras y órganos de la ONU han
reconocido que desde la llegada de los supervisores al país árabe,
los niveles de hostilidad han disminuido, aunque al mismo tiempo hay
un evidente incremento de actos terroristas.
Entre estos últimos están los atentados con carros bomba
ocurridos ayer en Damasco con saldo de 55 muertos y casi 400
heridos.
Sobre ese ataque, el Consejo de Seguridad emitió una declaración
que condenó toda acción terrorista como criminal e injustificable,
sin importar sus motivaciones ni dónde, cuándo y por quién sea
cometido.
El propio general Mood estuvo cerca de uno de esos atentados el
pasado miércoles, cuando se produjo una explosión al paso de un
convoy de observadores en la ciudad de Daraa, sin ocasionar lesiones
a los supervisores, aunque sí a varios escoltas sirios.