Aproximadamente
un millón de cubanos son asmáticos aunque menos de la tercera parte
padecen la forma más severa de la enfermedad, dijo en La Habana el
Doctor en Ciencias Médicas Juan Carlos Rodríguez Vázquez, presidente
de la Comisión Nacional de Asma del Ministerio de Salud Pública.
Al celebrarse en estos primeros días de mayo el Día Mundial del
Asma, que afecta a más de 300 millones de personas en el planeta, el
científico destacó la importancia que tiene para estos pacientes
aprender a vivir con su enfermedad, seguir las orientaciones del
médico, mantener un seguimiento periódico y el apego al tratamiento
preventivo.
La práctica de ejercicios, combatir la obesidad, una dieta sana y
el control ambiental pueden ayudar a vivir con mejor calidad,
sustentó.
El profesor Rodríguez Vázquez, especialista de segundo grado en
Neumología del Hospital Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras, dijo
que como enfermedad crónica el asma no es curable pero con un
tratamiento integral adecuado, que incluye la educación, el manejo
no farmacológico y medicamentos, es controlable y los pacientes
viven con buena calidad de vida.
Comentó que la aparición de esta dolencia es más frecuente en las
primeras décadas de la vida, aunque puede manifestarse por primera
vez a cualquier edad. Se caracteriza por una inflamación crónica de
las vías aéreas que cursa con obstrucción al flujo de aire y se
expresa por dificultad respiratoria, sibilancia ("jipido" en
lenguaje popular) y tos muy frecuente en las noches.
En cuanto a las causas principales que la producen, el
especialista dijo que la predisposición familiar (genética) es
importante, pero los factores ambientales desempeñan un papel
crucial para desencadenar la aparición de la enfermedad, ya sean
domésticas, ambientales o laborales.
Calificó de "múltiples" los factores desencadenantes de las
crisis, en las que pueden influir también, entre otros, cambios
atmosféricos, infecciones respiratorias agudas, hábitos
nutricionales, el tabaquismo, el embarazo, la pubertad, la
menopausia y olores intensos irritantes.
A una pregunta de Granma sobre cuál consideraba la
terapéutica de elección de estos pacientes, indicó: Eso es difícil
de decir porque el tratamiento es integral y, como expresé, transita
desde la educación del paciente, estilos de vida sanos y un adecuado
manejo farmacológico preventivo.