Un plan de contingencia con la intención de atender a pacientes
necesitados de cirugía se pondrá en marcha desde este martes en
Bolivia para contrarrestar los efectos del paro indefinido en el
sector de la salud pública.
El proyecto fue adelantado la víspera por el vicepresidente
Alvaro García Linera y ratificado poco después por el director
general de Servicios de Salud del Ministerio de Salud y Deportes,
Jhonny Vedia, reporta Prensa Latina.
La intención de García Linera, a quien se le atribuye la
paternidad del plan, pasa por compensar los efectos del paro médico
indefinido, el cual cumple ya 42 días, en reclamo de la abrogación
del Decreto Supremo 1142, que repone las ocho horas de trabajo para
el sector.
Desde las primeras horas de la mañana, en la sede del referido
ministerio se abrirá un área de control y un consultorio, aseguró
Vedia, quien insistió en que "en principio vamos a actuar con todas
aquellas patologías que quirúrgicamente lo necesitan, o sea que
vamos a priorizar las que necesitan urgencia".
Al mismo tiempo, adelantó que el ministerio creo el área de apoyo
social en salud, a cargo de trabajadores sociales, los cuales
atenderán desde las 08:00 hasta las 20:00 hora local, con la
intención de registrar a aquellas personas que necesiten tratamiento
urgente, clínico o quirúrgico.
Como condición, según Vedia, los enfermos deben presentar el
carnet de identidad original y una fotocopia del mismo, en caso de
contar con seguro médico.
La máxima prioridad la tendrán aquellos con cirugías programadas,
porque "no olvidemos que si están programadas es porque tienen algo
afectando su situación de salud".
Cuatro centros de salud fueron habilitados para el plan de
contingencia, una alternativa gubernamental para enfrentar la huelga
de los trabajadores del sector, los cuales se niegan a volver al
trabajo a pesar de la anulación del Decreto Supremo 1126.
El presidente Evo Morales anunció a finales de la semana anterior
la anulación del referido dictamen, la causa por la cual los
galenos, trabajadores del sector y estudiantes de medicina iniciaron
la huelga, pero aun así estos mantienen sus posiciones.
El mandatario, el vicepresidente, varios ministros y legisladores
pidieron en las últimas horas a los huelguistas que volvieran a sus
puestos y trabajaran en un proyecto para la reunión nacional de
salud, convocada para finales de julio, pero hasta ahora todos los
intentos fueron infructuosos.
En los últimos días varias personas murieron en esta capital por
falta de atención médica, entre ellos dos menores.