QUITO, 29 abril.— El gobierno ecuatoriano ahorra unos 100
millones de dólares anuales por concepto de reducción de las
pérdidas de energía, informaron hoy autoridades del sector.
En materia de fuga energética, Ecuador tenía un historial
negativo atribuido oficialmente a negligencia y corrupción, las
cuales alcanzaban el 23 por ciento de la facturación total,
equivalente a unos 230 millones de dólares anuales.
Actualmente, la gestión gubernamental ha logrado reducir las
pérdidas en ocho puntos porcentuales, hasta lograr un 14,7 por
ciento, lo que ubica a Ecuador en mejor situación que Brasil,
Paraguay, Venezuela y Colombia.
Este indicador está ahora cerca del promedio de América Latina
que bordea el 15 por ciento, precisa el Ministerio de Electricidad y
Energía Renovable cuyo Plan de Reducción de Pérdidas busca
disminuirla en los sistemas de distribución.
La capacidad actualmente instalada en el país es de tres mil 770
megavatios, y Ecuador prevé duplicar su generación de electricidad
en el año 2016, cuando estén en pleno funcionamiento ocho nuevos
proyectos hidroeléctricos.
Con una inversión de cuatro mil 983 millones de dólares, los
nuevos proyectos aumentarán a seis mil 779 megavatios de potencia la
capacidad instalada en el país.
La demanda nacional de energía hoy es de dos mil 800 megavatios,
que provienen de centrales hidroeléctricas, térmicas (que usan
petróleo) y de la compra de electricidad a Colombia, en cuya
reducción el ahorro de pérdidas constituye un factor importante.