TEGUCIGALPA, 29 abril.— La Fiscalía Especial de la Mujer en
Honduras registra hoy más de 90 muertes violentas de féminas en lo
que va de este año.
Según esa entidad, las características de las víctimas son
diversas, aunque algo común es la manera en la cual fueron
encontradas en calles o matorrales con perforaciones de balas en sus
cuerpos.
El Estado hondureño no procura evitar más asesinatos ni apoyar a
los operadores de justicia para que con logística y personal
investigativo se acabe al menos la impunidad, criticó la fiscal
especial de la Mujer, Grissel Amaya.
Citada por medios locales de prensa, Amaya comentó que no se
cuenta con personal adscrito al Ministerio Público para investigar
miles de denuncias.
Datos del comisionado nacional de los Derechos Humanos, Ramón
Custodio, precisan que en 2011 se produjeron 86,5 homicidios por
cada 100 mil habitantes, casi 10 veces superior al índice normal
(hasta 8,8 muertes) establecido por la Organización Mundial de la
Salud.
Agregan que en esta nación existen más de 800 mil armas en poder
de diversos sectores de la ciudadanía, de las cuales 650 mil
circulan de manera ilegal.
El Informe sobre Desarrollo Humano de América Central 2009-2010
del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo subraya que la
mayor parte de las muertes hondureñas se deben a AK-47, rifles de
asalto, ametralladoras, pistolas, machetes y puñales.