SANTIAGO DE CHILE, 25 abril.— Los gases lacrimógenos tornaron irrespirable hoy el Paseo Ahumada de esta capital, considerada la principal arteria de Chile por donde transitan a diario más de un millón de santiaguinos.

Prensa Latina constató cómo invadieron la emblemática zona los carros lanza gases y lanza agua con el propósito de dispersar a manifestantes asistentes a la primera movilización popular masiva de este 2012 en rechazo al modelo sociopolítico imperante en Chile.

A la altura de las calles Ahumada y la Alameda Fuerzas Especiales de Carabineros irrumpieron, obligando a cerrar las numerosas oficinas y centros comerciales del lugar.

El Paseo Ahumada quedó de hecho desierto, al estilo de un habitual día feriado o de una jornada dominical, cuando la populosa zona deja de serlo.

La represión policial tuvo lugar en el cierre de una multitudinaria manifestación, calificada aquí como el comienzo de una nueva etapa de la lucha social por cambios estructurales en el modelo sociopolítico.

En las principales ciudades de Chile, estudiantes y trabajadores de todos los sectores sociales se manifestaron este miércoles en calles y ciudades en lo que fue anunciado como la arrncada de la protesta social en el país este año.

Sólo en esta capital se estiman en casi 100 mil las personas que marcharon por la Alameda y que se concentraron finalmente en un acto político cultural frente a la Estación Cultural Mapocho.

También marcharon miles de protestantes en la ciudad de Valparaíso, sede del Poder Legislativo y en otras ciudades como Concepción, La Serena, Osorno, Talca y Chillán.

La respuesta a la convocatoria superó las expectativas y sorprendió incluso a los organizadores de la manifestación.

Avezados analistas apuntaron que hasta el gobierno quedó sorprendido por la masividad de la marcha, cuando suponían había un desgaste en la fuerza del movimiento social.