Un asalto simulado para ocupar una pequeña isla realizaron este
miércoles comandos de Estados Unidos y Filipinas, dentro de sus
ejercicios militares involucrando miles de soldados, pese al alerta
China de que aumentan riesgos de un conflicto armado.
De acuerdo con fuentes militares, esa acción se desarrolla en la
isla suroccidental de Palawan, que coincide con la disputa entre
barcos chinos y filipinos cerca del banco de arena de Scarborough,
en una porción diferente del Mar del Este, reporta Prensa Latina.
En la misma denominada Balikatán (hombro con hombro), en camino
desde el 2002, intervienen al menos cuatro mil 500 soldados
estadounidenses y dos mil 300 filipinos.
Sin embargo, la gran participación de militares de Washington
reflejan de acuerdo con fuentes diplomáticas los intentos de Estados
Unidos para reafirmar su presencia frente a China en la región de
Asia Pacífico.
Precisamente, reportes de la agencia de noticias Xinhua desde
Beijing informan sobre una protesta solemne ante Manila, por su
envío de embarcaciones adicionales a la Isla Huangyan.
También la urgió adoptar medidas positivas para restablecer la
paz y armonía en las aguas frente a las costas de la esa región.
Mientras, en declaraciones a la prensa, el comandante de los
marines del Pentágono en el Océano Pacífico, general Duane Thiessen,
afirmó que "Estados Unidos y Filipinas tienen un tratado de defensa
común que garantiza nuestro compromiso en la defensa mutua".
Pero, esas de Thiessen se producen en un momento de tensión entre
China y Filipinas por los atolones de Scarborough, ("Panatag" en
tagalo y "Huangyan" en chino), disputados por ambas naciones en el
Mar Oriental.
El jefe militar de las Filipinas occidentales, general Juancho
Sabban, comunicó por su parte a medios informativos que la operación
significa simplemente que queremos trabajar juntos (EE.UU.) y
mejorar nuestras habilidades.
Aunque, el territorio que abarca el comando de Sabban incluye
Reed Bank y las Spratlys, unos 250 islotes en su mayoría
inhabitables que se extienden sobre 427 mil 350 kilómetros
cuadrados, al oeste de Palawán, y reclamadas por China, Taiwán y
Vietnam y en parte por Malasia, Brunei y Filipinas.
China, Filipinas y otras naciones de la región como Vietnam,
Malasia y Brunei se disputan la soberanía de cientos de islas en el
Mar Meridional, como las Spratly y las Paracel, que se asientan
sobre reservas de petróleo y gas aún por explotar.