El hielo en el Ártico está disminuyendo, un hecho ya probado,
ratificó Duncan Wingham, director ejecutivo del National Environment
Research, durante la presentación del primer mapa topográfico que
refleja la densidad del casquete polar.
La misión Cryosat nos va a permitir registrar con mayor precisión
la pérdida de volumen y conocer mejor la dinámica de las nieves en
la región, manifestó el experto, quien consideró al satélite como el
"guardián del hielo", reporta Prensa Latina.
Por su parte, Volker Liebig, director del Programa de Observación
Terrestre de la Agencia Espacial Europea, señaló que aún no se puede
asegurar si las oscilaciones en la densidad son estacionales o si se
pueden relacionar con el cambio climático.
Necesitamos los datos durante dos o tres años para averiguar si
existe realmente una tendencia, por ello el trabajo fundamental del
satélite será ese, determinar de qué manera el banco de hielo del
Ártico responde al cambio climático, expresó el experto.
El mapa, divulgado la víspera en la Royal Society de Londres, fue
creado a partir de imágenes tomadas entre octubre de 2010 y marzo
2011 por el satélite CryoSat-2, y confirmó la existencia de grandes
variaciones en el espesor de la capa helada del océano Ártico.
Para ello en el satélite espacial, lanzado en abril de 2010, se
incluyó un altímetro de última generación capaz de tomar imágenes a
través de las nubes y en la oscuridad.
En el proyecto participan alrededor de 150 científicos, de 12
universidades y nueve institutos de investigación, quienes esperan
elaborar mapas todavía más detallados que permitan desarrollar
nuevas investigaciones sobre las consecuencias del cambio climático.