Rosa Aurora Freijanes, esposa de Fernando González Llort, uno de
los cinco antiterroristas cubanos condenados en Miami, en 2001,
afirmó que ellos jamás se han sentido derrotados.
Los Cinco Héroes cubanos estaban en Florida, en 1998 (cuando se
les arrestó), para evitar más dolor a la Isla por actos terroristas,
añadió Rosa Aurora, en entrevista publicada por el diario digital
Escambray (www.escambray.cu), de Sancti Spíritus.
Fernan nunca se queja, apuntó su compañera, quien compartió la
vida con este luchador desde junio de 1990 y se casó con él, por
poder, en 2002.
En su intercambio con el periodista, narró pasajes de su
convivencia con quien —refiere— es un cubano típico y muy alejado de
ser un soldadito de plomo, como puede imaginarse alguna persona al
verlo tan serio.
Aclaró que él —que tuvo entre sus misiones la de monitorear al
connotado terrorista Orlando Bosch—, es una persona muy seria para
las cuestiones que conllevan responsabilidad, pero en la vida
cotidiana se comporta como un cubano más.
Fernando es un hombre de detalles, comentó su compañera en la
pequeña sala de su apartamento en La Habana, donde guarda las cartas
de él, quien, ante sus confesas carencias poéticas, le envió, en
determinada ocasión, el poema Todavía, de Mario Benedetti, por
saberla admiradora del bardo uruguayo.
Antes de la partida desde Cuba hacia EE.UU. del compañero de René
González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Gerardo Hernández,
—narró Rosa Aurora—, Fernan le leía poesías de César Vallejo, Pablo
Neruda y Roque Dalton..
Cuando compartíamos nuestra vida, nos encantaban las fiestas,
aunque ninguno de los dos bailamos bien como para hacerlo en una
rueda de casino, acotó.
Íbamos al teatro, al cine, la última película que vimos juntos
fue Fresa y chocolate, apuntó y agregó que Fernando tiene un grupo
de amistades desde el Preuniversitario, gente también muy divertida,
y siempre estábamos inventando algo, éramos callejeros, en verdad.
De esos tiempos es la guayabera blanca, muy usada y de mangas
cortas, que él donó al proyecto sociocultural de Sancti Spíritus,
donde existe una colección de ese tipo de prenda de vestir,
utilizada por personalidades.
En diciembre de 2009, en el edificio de la Corte Federal,
Distrito Sur de la Florida, la jueza Joan Lenard, dictó la
resentencia para Fernando, de 17 años más nueve meses de cárcel, lo
cual significa que tiene que permanecer en encierro hasta el 27 de
febrero de 2014.
Ese día, la esposa del antiterrorista pudo estar en esa vista
judicial, ya que fue una de las 11 veces, en casi 14 años de
encierro, que las autoridades de Washington le han dado visa para
viajar a territorio estadounidense.
Ahora, por ejemplo, hace una semana no tenemos comunicación con
él; está en lock down (encierro total, una sola comida —fría—
al día, ningún contacto con el exterior y nada de baño), significó.
En la visita —aclaró—, al llegar y al irte le puedes dar un beso
y un abrazo; no puede haber más contacto durante esta, que es de
8:00 de la mañana a 3:00 de la tarde.