El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunció este sábado la
decisión de crear unidades de radioterapia oncológica en hospitales
públicos e infantiles del país, para lo cual gestiona la
contratación de especialistas en Cuba y Argentina.
Durante su habitual rendición de cuentas sabatina a la
ciudadanía, esta vez desde Cutuglagua en la periferia sur de Quito,
destacó la labor de la Sociedad de Lucha Contra el Cáncer (Solca),
pero argumentó que ese centro ya se encuentra saturado, reporta
Prensa Latina.
Estamos contactando a nuestra embajadas en Argentina y en Cuba
para tratar de contratar especialistas en radioterapia lo más rápido
posible, este es un drama social que el Estado debe solucionar,
afirmó Correa.
No entiendo por qué en los hospitales públicos no se han hecho
estas unidades de radioterapia y descongestionamos también a Solca.
Ya está dada la orden para que en Guayaquil, Quito y Cuenca se
construyan esas salas de radioterapia, precisó el mandatario.
Orientó a las autoridades del Ministerio de Salud comenzar de
inmediato a formar los especialistas en radioterapia y contratar
personal extranjero si es necesario.
Ojalá en pocos meses, tengamos estas unidades en las tres
ciudades, exclamó.
Por el momento, Solca considera que con los mismos equipos pueden
dar servicio, pero hacen falta especialistas para operar esas
máquinas, aclaró.
Adelantó que el gobierno construirá albergues en los hospitales
que ofrezcan el servicio de radioterapia, pues esas máquinas por su
alto costo no pueden estar en todo el país y es necesario dar un
espacio a los familiares de los pacientes que están en tratamiento.
Hay gente que viaja de otras ciudades y no tiene dónde alojarse.
Debemos dar soluciones a este drama social que es el cáncer,
puntualizó.
El deber de un gobierno socialista, consideró Correa, es que la
ciudadanía acceda a los derechos que establece la Constitución, como
la salud, sin que tenga que ser necesariamente el Estado quien lo
provea, y orientó contratar algunos servicios a privados.
Dediquemos los esfuerzos del Gobierno a la salud preventiva y la
atención primaria y familiar, que no hace el sector privado, y lo
que puede hacer el sector privado que lo haga con control del
Estado, que pagará por esos servicios según un tarifario aprobado,
apuntó.