El
exvicepresidente de Egipto y antiguo "número dos" del régimen de
Hosni Mubarak, Omar Suleimán, dio este viernes
marcha atrás en su decisión de no presentarse a los comicios
presidenciales de mayo y anunció su candidatura.
El director de prensa de su campaña electoral,
Mohamed Mishaal, dijo que "Suleimán anunció este viernes
oficialmente su candidatura a las elecciones presidenciales,
después de las grandes manifestaciones en apoyo a su
persona".
El miércoles pasado, el propio Mishaal informó de
que el exvicepresidente no iba a concurrir a los comicios
de los próximos 23 y 24 de mayo, "por no
poder cumplir las exigencias administrativas y económicas de la
candidatura".
Sin embargo, añadió Mishaal, miles de partidarios de
Suleimán se concentraron este viernes en la plaza de Abasiya, en el
noreste de El Cairo, y frente a su vivienda en el distrito de Masr
Guedida para hacerle cambiar de opinión.
Mishaal apuntó que fue el propio Suleimán
quien anunció en un pequeño discurso frente a sus
seguidores que se presentará a los comicios y que "con la ayuda de
Dios y del pueblo espera superar las dificultades administrativas".
A juicio del portavoz, el que fuera también
jefe de los Servicios Secretos durante el régimen de Mubarak
cambió su parecer "para cumplir con el pueblo, porque él es un
militar y obedece sus órdenes".
Mishaal agregó que Suleimán presentará la
documentación para registrarse como candidato a las elecciones
el próximo domingo, fecha en la que expira el plazo
para inscribirse.
En un comunicado, colgado este viernes en Facebook,
Suleimán prometió que hará todos los esfuerzos posibles a lo largo
del sábado para lograr las firmas requeridas para
postularse -al menos 30.000 de ciudadanos de quince
provincias.
"El llamamiento que me habéis dirigido es una orden
y yo como soldado no lo he desobedecido a lo largo de mi vida. Si
esta orden viene del pueblo creyente en su patria no puedo más que
responder a ella y participar en la candidatura", explicó Suleimán.
Suleimán hizo referencia a "obstáculos y
dificultades" para presentarse, aunque no dio más detalles.
Este general ha salido hasta ahora indemne
de los numerosos procesos judiciales abiertos en Egipto
contra figuras del antiguo régimen, comenzando por el propio Mubarak,
que está acusado de haber ordenado la muerte de manifestantes
durante la Revolución del 25 de enero.
Suleimán, que fue jefe de los Servicios Secretos
egipcios antes de ser nombrado vicepresidente el 29 de enero
de 2011 en una última maniobra de Mubarak para conservar el
poder, testificó en el juicio contra el antiguo presidente para
exculparlo.
El general puede contar para su candidatura con los
sectores de la sociedad que permanecen fieles a las
Fuerzas Armadas, que controlan el país de facto desde la
renuncia de Mubarak, así como con el amplio sector de tendencia
laica que teme la llegada al poder de los islamistas.